AlfonsoyAmigos no se pierde en los senderos

Al día siguiente, cada cual volverá a su rutina

Probablemente sea así para todo aquel que no se encuentre de vacaciones pero hoy, para AlfonsoyAmigos, la jornada ha sido diferente.

¿Qué se puede mostrar de tu casa a los amigos cuando ya todos la conocen sobradamente? Pues un nuevo mueble que has comprado, unas nuevas cortinas que has colgado, alguna nueva herramienta que has incorporado a tu taller de bricolaje… pequeños detalles que seguramente enseñes  con orgullo y alegría.

La misma alegría que sentimos los que por h o por b hemos acabado guiando a este grupo, ansioso de nuevas aventuras, cuando logramos enseñar un nuevo rincón desconocido.

Hoy el anfitrión, el jefe de ruta, ha sido Fer, que seguramente echaba de menos rodar acompañado “del grupo” y quería mostrarnos los nuevos senderos que había descubierto y recorrido en solitario.

Nos han anunciado que las temperaturas se disparaban de nuevo y ¡qué caray!, estamos en verano y hay que aprovechar las temperaturas más frescas del día, por lo que se propone de nuevo el inicio de ruta a las 8,30.

A punto estamos hoy de lograrlo, ese objetivo que se nos resiste por más empeño que pongamos: salir con puntualidad. Pero finalmente siempre surge el imponderable de última hora. Algunos se han esforzado esta vez más que de costumbre y, sin embargo, serán los “puntuales habituales” los que hoy fallen. Me resisto a creer que se trata de una causa perdida.

Tras dos jornadas de asistencia exigua, hoy sorprende ver que el número de asistentes ha crecido considerablemente. Se podría pensar que Fer ha ido llamando uno por uno a los compañeros para que no faltaran, o que se sabe que sus convocatorias tendrán un plus de dureza e intensidad y nadie se la querían perder. Ya es conocido que los ciclistas tenemos un punto importante de masoquistas.

Los que acuden de puntos más lejanos intentarán aparcar como siempre en el Paseo Rivera de San Rafael pero, en estos días, la mayor parte de la calle se ha convertido en peatonal. Dispuestos a afrontar la ruta que Fer propone acuden: Andrés, Ángel, Chupo, Fer, Fernando, Galo, Jesús, Luis Ángel, Nacho, Nati, Patrick, Pawel, Santi, Toño y Alfonso.

Atrevidos, osados, también masoquistas, pero ver a Fer acudir con su flamante e-bike no ayuda. Y llamadme suspicaz, pero poder saludar a Toño y a Nati viene a decirnos que "trialeras no van a faltar".

El grupo ataca la cuesta del campo de fútbol y de camino para Arroyo Mayor propongo una foto junto a la Fuente del Avellano, tantas veces olvidada y por algunos aún desconocida. Lástima que sus aguas se hayan secado en estas fechas.

Atravesamos el Prado Juan Llanos y todavía aprovecho a recordar a alguno que aquí estuvo el principal decorado de El Laberinto del Fauno.

Cruzamos Arroyo Mayor, apenas con un hilo de agua y avanzamos hacia el mirador de Peña El Águila, con ese corto repecho que aún nos sigue poniendo a prueba.

La Cañada Leonesa y esa fuente (la de Gerardo) que sí nos ofrece agua fresca pero de la que en varias ocasiones se han empeñado en arrancar la placa que recordaba el nombre de quien se molestó en hacerla aprovechable.

Nos plantamos en el Collado Hornillo y descendemos por el sendero divertido que tantas veces hemos recorrido, cortado en dos tramos por la pista que enfila hacia el Campamento de Peñas Blancas.

Hacia este Campamento nos dirigiremos, pero saliéndonos del trazado habitual para coger sendero sinuoso, disfrutón, que se adentra entre piornos sin llegar a perderse.

Grupos de campistas instalados aquí y allá en una amplia explanada, seguramente con afán de escapar de los calores veraniegos y sentir la naturaleza, nos verán pasar de a uno por senderos cercanos.

Bordeamos el Camping Valle Enmedio  y hacemos parada junto al pequeño embalse del Arroyo del Prado Toril, donde aprovechamos para refrescarnos y quedarnos incluso con ganas de zambullirnos en sus aguas, pero aún nos queda camino por recorrer y Fer ya está achuchando al grupo.

Muchos aprovecharán para rellenar sus bidones en fuente junto a pista forestal antes de coger el trazado habilidoso del Arroyo Chuvieco, (que no recuerdo haber visto nunca con agua), que nos acerca hasta el Collado de la Gargantilla.

Lo recuerdo una vez más: “Acabar descendiendo junto al arroyo Gargantilla ya hubiera sido ruta dura en tiempos”. Pero aún nos queda recorrido.

Pista forestal conocida con un par de repechos duros y desvío por la derecha que nos enseña Fer, con lo que nos ahorramos atravesar una zona que siempre resulta “pestosa”, bien por la humedad del terreno o por su hierba alta y seca en otras ocasiones.

A las puertas del Collado de las Lagunas una breve parada permite hacer otra foto de grupo en la que tal vez se eche de menos al fotógrafo.

A nuestra derecha quedaría el divertido descenso por el Camino de las Municiones, aunque he descubierto recientemente que ya hay quien lo recorre en ascenso. ¡Ojo a nuevas propuestas!

La propuesta de hoy es otra. Fer, Nati y Toño ya conocen el recorrido por paso reciente y otros lo recordamos como duro y lo tenemos abandonado en el recuerdo.

Descenso por sendero más a la izquierda que llaman de los Esportones, con toda seguridad por la Fuente del Esportón que dejamos sin ver un poco más abajo, junto al cauce del Arroyo del Prado Goyato.

Habrá quien cuente que lo recorrió sin apearse, quien reconozca acaso dos o tres puestas a pie, alguno que tuviera una voltereta, quien disfrutara de lo lindo en los tramos que lo permitieron y quien se resintió al final de ruta por haber cargado con los kilos de la e-bike en tramos muy escalonados.

Más abajo nos espera en cruce el Camino del Ingeniero y un Forlán que ha decidido salir a montar solo más tarde. Damos tiempo a que nuestro amigo cruce abrazos con todos y cada uno y seguimos adelante disfrutando del Ingeniero, Peña la Casa, Peña Morena… senderos y senderos divertidos que nos acercan a buen ritmo de vuelta a San Rafael.

El pasado cumpleaños de Jesús y el que está próximo por llegar de Santi darán lugar a sendas invitaciones que todos disfrutaremos con jarras de cerveza en la mano; muchas felicidades a ambos.

Sensación de ruta dura en la que el calor es un hándicap más, aunque sin grandes desniveles, exigente en habilidad, realizada a buen ritmo, que se ha superado con buena nota porque el grupo goza de muy buena forma física y técnica.

Sobresaliente la actuación de Nati, que cada día nos sorprende menos. Damos la bienvenida a Fernando, que siendo ciclista de naturaleza pistera reconoce haber recorrido más trialeras que en toda su vida y que se escapa de invitar "por novato" y porque este lunes es su cumpleaños. 
Y, por supuesto, gracias a Fer por la ilusión que siempre pone en las rutas que nos prepara.

¡¡Súbete, que esto no para!!