Ayer, por la mañana, salí sin rumbo fijo, dejando que fuera mi caballo el que guiara. Así, con una temperatura espléndida, me encuentro subiendo por el camino de “El Arcipreste”. La verdad es que detecto que subo más torpe de lo habitual (creo que era falta de motivación). No obstante, decido tomar variante que me lleva al paso del “Collado” y desciendo por camino trialero hasta el camino que nos lleva hacia la ruta de “La Fuenfría”. Giro a la derecha y alcanzo el cruce con la nacional. Subida de 1 Km por carretera y estoy en el “Alto del León”. Enfilo hacia las antenas y antes de girar a la derecha para abrir la cancela, observo que aparece un nuevo senderillo a la izquierda, que antes no estaba.
La curiosidad me puede y lo sigo, va tomando altura, pero poco a poco; es muy estrecho, pero se puede rodar. Sigo avanzando, pero después de un km, más o menos, el sendero llega a su fin. Es el acceso para unos operarios que están arreglando una canalización de agua para el Centro Militar del Alto. Mi gozo en un pozo y nunca mejor dicho, porque es lo que están limpiando afanosos. Por no regresar por el mismo camino, me dejo caer campo a través y cuesta abajo, jugándome el pellejo con las abundantes zarzas y cardos. Me salvo de pinchar pero no de los arañazos en piernas y brazos. Estoy en el Camino del Viacrucis, por el que regreso hacia el Alto, para atravesar la cancela que antes abandoné. Subidas y bajadas ya conocidas hasta llegar al cruce con el Arroyo Lagasca.
Respiro hondo e intento la subida, que resulta muy lenta pero asequible. Cuando llevo un buen trecho, recuerdo que seguir no era el objetivo, solamente intentarlo, por lo que doy la vuelta. Nuevamente en el arroyo, recuerdo el senderillo que a veces seguíamos, enfilando derecho, que es el que tomo.
Muy seco el arroyo, bastante ramaje suelto, pero es transitable con habilidad y una opción a recordar. Hago por llegar a los depósitos de agua y, mirando atrás, veo la pendiente que acabo de descender y que antaño habíamos subido.....Nuevo intento de retomarlo en subida y lo hago hasta la mitad, pero tampoco era este el objetivo y me dejo caer. Sendero a izquierdas antes del depósito, muy agradable. Descenso rápido por pendiente pronunciada hasta “Arroyo Mayor” y Vuelta a casa satisfecho.