Objetivos cumplidos
Fotografía: Juan y Alfonso
Cuando suena el despertador, aún puedo sentir el eco de la
música que ha acompañado de madrugada. San
Rafael está en fiestas.
El “Paseo de las Bolas”
de El Espinar es para AlfonsoyAmigos un punto de encuentro
habitual para muchos inicios de ruta.
Espinariegos, fondilleros y veteranos del Grupo acudimos sin
extravío a la cita. Sin embargo habrá quien, teniendo que recurrir al navegador
de su coche, encontrará problemas para llegar si no teclea Calle de la Luna.
Junto a la Calle de la Luna - El Espinar |
Poco antes de las 9 de la mañana goteo de ciclistas y ya
estamos cruzando abrazos y saludos entre amigos, a la par que damos un último
repaso a nuestras máquinas.
La nómina de hoy la componen: Andrés, Ángel, Diego, Enrique, Ernesto,
Javi “Galo”, Jesús, Juan, Luis Ángel, Luis Ángel Jr., Manolo, Miguel Ángel, Samuel,
Toño y Alfonso. Somos quince, “la niña bonita”, aunque las nuestras, una de
ellas cumple años hoy, no nos acompañan en esta ocasión.
Abrevadero de Santo Domingo |
Galo hacía tiempo que no acudía pero sabe que siempre es
recibido con cariño, como aquellos amigos que se dejan ver poco.
¿Se conoce la ruta de hoy? – Solo en parte por algunos, pero
existe buen ánimo para afrontarla y se dejan guiar.
Abrevadero de la Mata de Santo Domingo - El Espinar |
Enfilamos hacia el Polígono Industrial los Llanos y sin
detenernos pasamos junto a la Fuente y la Ermita de San Isidro, de la que ya
hablaremos en otra ocasión.
Leyenda en el Abrevadero de la Mata de Santo Domingo - El Espinar |
Cruzamos la SG-500 e iniciamos ascenso habitual por el Camino
de los Castrejones, pero hoy será diferente. Nada más cruzar “paso canadiense”
superamos unos corrales y tomamos camino en giro a la izquierda.
Arco de Santo Domingo - El Espinar |
Algunos se adelantan y pronto habrá que darles un silbido
para que detengan su marcha, se han pasado el desvío.
Tenemos que alcanzar el Pilón de la Mata de Santo Domingo,
que fue ampliado y restaurado no hace mucho. En estas fechas apenas ofrece un
hilo de agua.
Arco de Santo Domingo - El espinar |
Desde ahí, unas decenas de metros campo a través para
encontrarnos bajo el Arco de Santo Domingo, que en toda ocasión sorprende a
quien le visita. La primera vez que nos acercamos hasta el en ruta de domingo.
Arco de Santo Domingo - El Espinar |
Fotos, risas y algún dato histórico que facilito a los que
muestran interés por ello.
Retomamos ruta por sendero conocido y que es siempre
agradable cuando la buena temperatura lo permite y en esta ocasión así
coincide. Corre un aire fresquillo que algunos agradecemos y a otros les ha
aconsejado ponerse más ropa de la necesaria.
A nuestra derecha la Majada de los Cardos, que hace honor a
su nombre. Raro que no acabemos pinchando. Y poco más adelante seguimos junto a la Cantera de Navalvillar,
que recomendamos visitar.
Cañada Real Soriana Occidental - El Espinar |
Toño ha acudido hoy con una rodilla maltrecha y dolorida,
pero parece que aguanta bien de momento. ¡Bien!
En zona especialmente empedrada donde hay que realizar
esfuerzo con las pedaladas, se oirá un ruido fuerte y extraño que no presagia
nada bueno. Se detiene la marcha y llegan noticias: “Toño ha roto la
patilla”
Ángel Sierra |
Pensamos que hay solución, pues la mayoría llevamos pieza de
repuesto, pero después de unos minutos de espera nos dicen que Toño ha
regresado a casa. El cambio y desviador han roto por lugar
incomprensible y no hay más arreglo que la total sustitución.
Enrique M. |
A Toño le tocará volver más de un tramo empujando la bici,
pero no estamos todavía muy lejos de casa.
Reemprendemos marcha y bordeamos el Cerro de El Potril por
lugares habituales para los cazadores en temporada.
Encrucijada de caminos que nos han visto pasar en ruta hacia
Las Ermitas, La Ermita del Cubillo, el Telégrafo Óptico y muchas otras rutas.
Luis Ángel |
Saltamos cerca de piedra y ya estamos en la Cañada Real
Soriana Occidental que seguimos para bordear en esta ocasión la Cerca Portillo.
Samuel |
Apenas recorremos poco más de 2 kms por la SG-500 hasta dejar
a nuestra derecha el Campo de Golf y antiguas instalaciones de vertedero
municipal, al que se acercan algunas aves rapaces buscando residuos orgánicos
abandonados.
Alcanzamos el punto más alto de esta pista, que se haría
tediosa de no marchar en grupo.
Junto al Observatorio de Aves - El Espinar |
Siguiendo de frente podríamos descender hasta el cauce del
Río Voltoya, pero nuestra ruta gira a la izquierda y nos presenta la Vereda de
los Serranos.
Jesús |
Esta vereda y las que superaremos a continuación están en
mejores condiciones que años atrás, pero aún siguen siendo muy duras por el
desnivel y la mucha piedra suelta que contienen.
Ernesto y Manolo |
Paciencia, voluntad y buena pedalada. El grupo se estira y se
estira, pero va remontando los primeros desniveles.
Antes de alcanzar cruce con el recorrido de Escalada a laCepeda, tomaremos desvío a la izquierda, pues quiero enseñarles el observatorio
de aves que allí se encuentra y las estupendas vistas que se pueden divisar.
Hoy no hay suerte , los buitres no se dejan ver, pero Juan y Ángel parecerán
pajarracos subidos por las piedras.
Diego |
Alcanzamos a ver el Refugio del Berceal y sabemos que
podremos encontrar agua. Un par de pilones en esta zona, pero solo el más
alejado del refugio nos ofrece agua, que aprovechamos para repostar y
refrescarnos. No corre un pelo de aire y ya hace calor.
Refugio del Berceal |
Cuando alcanzamos a ver la garganta del Arroyo Boquerón
sabemos que hemos alcanzado el punto más alto (1595 m), pero aún nos resta
dificultad.
Estamos en el cruce de las Tres Provincias, donde se dan la
mano Segovia, Madrid y Ávila.
Javier "Galo" |
Comenzamos a descender por la Vereda de Santa Quiteria, pero
OJO, después de la primera curva a izquierdas hay que estar pendiente de
senderillo que sale por la derecha y que se nos muestra muy empinado en
descenso.
Resbalando con la bicicleta o a pié acabamos en el cauce y prácticamente
nacimiento del Arroyo del Boquerón.
Ángel, Miguel Ángel, Jesús... |
Si lo has hecho bien, podrás ver mini sendero en duro ascenso
que tras unas zetas y después de cargar con las bicicletas, te pondrán en el
verdadero inicio o final (que diría otro)
del Camino del Ingeniero.
Luis Ángel JR. |
He avisado de que hay tramos peligrosos, donde una caída
podría llevarte bastantes metros ladera abajo, pero parten en cabeza nuestros
exploradores Galo y Juan para marcar trazadas.
Galo y Luis Ángel |
Me sorprende comprobar que supero tramos donde años atrás
puse pie sin remedio. Lo mismo para el resto de mis compañeros, que ya no se
detendrán hasta el cuestón por encima de Peña La Casa.
Alfonso, Manolo... |
Las zetas del descenso están limpias y son divertidas a pesar
de que hay que extremar la precaución. Cada uno se marcará sus límites.
Realizando un último agrupamiento Ernesto comprueba que ha
perdido aire de una rueda, pero ya estamos de vuelta.
Andrés, Ángel, Luis Ángel Jr... |
De nuevo en el “Paseo de las Bolas” y sin dejar las
bicicletas nos vamos a tomar un merecido refrigerio.
Junto a la garganta del Arroyo Boquerón |
Toño se nos vuelve a unir para compartir risas, anécdotas y
buenos aperitivos. Su cambio destrozado, pero buenas sensaciones con la
rodilla. (Nos alegramos un montón). Y
Galo nos invitará a todos a una ronda por su cumpleaños. ¡Que cumplas muchos
más amigo!