AlfonsoyAmigos en la Marcha MTB Sexmo de Cabezas

Hay rutas que se convierten en épicas sin haberlo previsto

Tocaba afrontar una buena madrugada, con encuentros en El Espinar o marchando directamente a Mozoncillo, pero teníamos que hacer por coincidir, ya que los dorsales llegaban en un solo paquete.

Pequeños despistes en la carretera y la aglomeración de participantes en la Marcha, que se reparten por todas las calles del pueblo, nos demorará el encuentro.

Saludos, abrazos… pero ¡vamos!, que se nos echa la hora encima y aún no hemos colocado los dorsales.

Se nota que lo nuestro, de la mayoría de AlfonsoyAmigos, no es participar en este tipo de eventos pues cuando nos acercamos a la línea de salida nos tenemos que colocar al final de todos los participantes, muy lejos del arco de salida. Si nos descuidamos parten sin nosotros.

Y así arrancamos sin haber calentado las piernas, bajo un cielo totalmente despejado de nubes, con un sol que ya aprieta y pica a primera hora.

La pista rural que recorremos es ancha, pero tenemos delante todo el grueso de participantes. Nos cuesta avanzar y además nos estamos tragando todo el polvo que levantan, que no es poco.

Con habilidad vamos adelantando y tomando posiciones, cubriendo el paso para que el compañero pueda también avanzar.

Y no hay mucho que reseñar de los siguientes tramos recorridos, salvo la buena aceptación de los vecinos de los pueblos que atravesamos, que han salido a las calles a animar con entusiasmo y a indicar el camino correcto.

No teníamos muy claro si la intención del grupo era realizar el trazado corto o el largo… Ya se vería.

Al llegar al avituallamiento de Cantimpalos, después de 25 kms recorridos, ya hay que tomar decisión. Parece ser que la mayoría quiere optar por la ruta corta, aunque hay compañeros que se fueron para la larga directamente.

En mi cabeza estaba fija la idea de tomar el trazado más corto, máxime con estos calores que ya van haciendo mella en todos, pero Enrique, que parece querer tomarse revancha de no haber acudido a la Madrid-Segovia, anima a todos a seguir, contando con la opción de que nos acaben desviando en el km 75 por no llegar “al corte”.

Juan Patricio, Rafa, Toño y alguno más tienen muy claro que optan por la corta. Yo debería haber hecho lo mismo, pero reconozco que soy un “hombre fácil” y el mismo Toño se extraña de verme partir con el grupo de “la larga”.

Pasarán pocos kilómetros y ya empezaré a preguntarme “¿qué haga yo aquí?

El calor aprieta, ya no bajaremos de los 38 grados y solamente te alivia el poco aire que mueves a cada pedalada.

Atravesamos pueblos en los que no se deja ver ni un simple pilón o abrevadero que contenga agua y sigues adelante.

En Zamarramala encontramos puesto de avituallamiento, llevamos 42 kms. Algo de fruta, algunos Acuarius que ya se resienten del calor y una pequeña fuente (adorno para pajarillos) que da poca agua y caliente.

De camino para Segovia abandonamos las pistas rurales para coger algunos senderos apenas trialeros en los que habrá que atacar duros repechos en los que el aire se ha detenido y el sol se clava en las partes no cubiertas por la equipación.

Las vistas a Segovia son formidables, alcanzamos a ver el Alcázar y la Catedral, pero apenas lo disfrutamos mientras damos pedalada a pedalada. Hay incluso algún tramo corto que es imposible de superar montado y obliga a empujar la máquina.

Nos alejamos de Segovia capital por senderos duros y complicados que, en otras circunstancias, hubieran podido ser divertidos.

Aquí, en este terreno, cuando el aire se ha detenido por completo y los termómetros están a punto de estallar es cuando siento el aviso de un fuerte golpe de calor que me preocupará y lo hará también a los compañeros que ruedan a mi lado. Poco más atrás el que va sufriendo calambres es Santi que progresa con dificultad.

Cuando logramos remontar el tramo duro y largo nos encontramos a las puertas de Bernuy de Porreros, donde se nos indica que en una pequeña callejuela hay una buena fuente. ¡Bendita fuente!

Agua fresca para beber y abundante como para permitirme meter totalmente la cabeza debajo del chorro salvador y conseguir que la temperatura del cuerpo descienda. No seré el único que realice estas maniobras.

Unos metros más adelante me uno a grupo de compañeros. Hay un vecino y su hijo repartiendo generosos agua con una manguera. ¡Buena gente!

Santi llega con dificultad y Chupo se ofrece a marchar para regresar a este punto con su furgoneta y recogernos.

Enrique consulta el mapa. Hay otro pueblo apenas a 6 kms. ¿Por qué no vamos avanzando? Cruce de miradas entre los que allí estamos y volvemos a dar a los pedales.

Seis kilómetros, seis, pero con algunos desniveles que van causando mella en un Santi que lo que lamenta es retener nuestra marcha. Por mi parte, el agua de Bernuy ha sido milagrosa y me recupero con rapidez.

El pequeño grupo se estira y se encoge aprovechando algunos rápidos descensos para llegar a Mata de Quintanar, pero nuestra siguiente meta se encuentra a poco menos de 4 kms., Cabañas de Polendos. Santi sufre, pero avanza siempre acompañado por algún compañero.

Cuatro kms más y nos acercamos a Pinillos de Polendos. Seguimos avanzando hasta encontrarnos con el durísimo rampón que asciende a las puertas de la iglesia de Villovela de Pirón. Santi hace el esfuerzo y llega con la mano de Juan a su espalda. ¡¡BRAVO Y BRAVO!!

El coche de Protección Civil, amigos de El Espinar, nos han alcanzado. Llevan en su vehículo a varios ciclistas que no han podido continuar por falta de fuerzas o averías. Nos animan a seguir pero nos ofrecen 2 puestos libres que les queda.

Recibo llamada de Chupo. ¿Dónde estáis? ¿Voy a recogeros?... Gracias amigo, pero hemos decidido llegar.

El tramo para completar 100 kms fue cortado hace tiempo, hubo compañeros que entraron pero al final Protección Civil recortó algunos kms por el peligro de las altas temperaturas.

Apenas son entonces otros 8 kms más. Aún siguen marcando los desvíos los voluntarios de la organización.

Ya no encontraremos pendientes, pero sí pistas con mucha arena acumulada. La marcha se acelera, saber que la meta está cerca anima a todos y saca las últimas fuerzas a Santi.

Llegamos a Mozoncillo y ya encontramos a muchos ciclistas que han tenido tiempo de lavarse unas caras que nos miran con extrañeza.

Están retirando el arco de meta. ¿Acaso no contaban con que AlfonsoyAmigos completara?

¡¡Enhorabuena a la Organización por su excelente trabajo, a las buenas gentes de los pueblos del Sexmo de Cabezas que nos animaron y a los amigos miembros del equipo de Protección Civil que velaron por todos!!

Una marcha no competitiva que finalmente se convirtió en épica después de soportar todos temperaturas que llegaron a los 43º. Con un Santi que fue capaz de seguir adelante con sacrificio y pundonor y nos hace sentir orgullo a todos.

Por mi parte, valorar el tesón que me contagió Enrique y la preocupación que todos tuvieron cuando también lo pasé mal.

¡Claro, después hubo que invitarles a café!


El recorrido de los que hicimos la semi-larga

ATENTOS QUE LLEGA "FEMUKA"  

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