Bueno, no estamos en el fin del mundo, pero desde aquí casi se ve
Solamente algunos
compañeros conocíamos esta formidable ruta pero sabíamos que, a pesar
de su dureza, sería del agrado de todos
Nuestro
punto de encuentro y de inicio de ruta era el Puerto de Canencia (1524m). Se
dice de este Puerto que es uno de los pasos de montaña más bajos de la Sierra de Guadarrama y también uno de
los “menos transitados”…
¿Menos transitados…? Por quiénes y a qué horas. Porque cuando vamos al encuentro de
los amigos y tomamos carretera hacia el puerto desde Miraflores de la Sierra,
son numerosos los ciclistas de carretera que se han pegado el madrugón y ya
atacan el duro ascenso.
Conozco
el riesgo que asumo cada vez que realizo una ruta de MTB, pero me sigue dando pánico ver a los compañeros que, “con
la flaca”, se juegan el tipo por
carreteras sin arcén, con quitamiedos que parecen artilugios del demonio y
rezando para que ningún automovilista se despiste y se los lleve por delante. Amor por el deporte.
Fuente de La Raja |
La
carretera, construida en 1954 para unir el pueblo de Canencia con la capital, está
señalizada, avisa del tráfico de ciclistas pero hay que ir muy despacio con el
coche y más atento que nunca a la carretera. No
hay que tener prisa... Si
te aproximas a un ciclista ¡tranquilo! que él está deseando darte paso para que
le adelantes.
El
aparcamiento amplio de la zona recreativa acoge nuestros coches y apenas se ve
algún vehículo más a esas horas. Será
muy diferente cuando regresemos tras la ruta.
Algún
rezagado al encuentro pero antes de iniciar ruta ya estaremos listos:
Alberto,
Andrés, Ángel, Antonio (pues sí, ha
regresado), Chicho, Enrique, Fer, Javier, Jesús, Juan Patricio, Luis Ángel,
Miguel Ángel, Nico, Patrick, Rafa y Alfonso
En
el monolito que nos ve partir aparece la leyenda: “El camino de la vida siempre
pasa por un monte”
La
Fuente de La Raja provee de agua en
cuanto nos desviamos por pista forestal, pero venimos con los bidones llenos desde casa. Como siempre, a unos nos cuesta coger
ritmo y otros ya avanzan con soltura.
Fuente del Hornillo |
Cuando
llegamos al Centro de Educación
Ambiental, que da la impresión de estar cerrado, sabemos que a sus espaldas
tenemos que coger sendero en descenso que nos lleva hasta la confluencia del
Arroyo del Toril y del Arroyo del Sestil, a la zona de la Chorrera de Mojonavalle y el mirador del mismo nombre, pero este
año ha llovido poco y la cascada ha quedado en su mínima expresión.
Hemos
llegado a lugar emblemático y hacemos las fotos de recuerdo… y ahora es más
duro regresar por el mismo sendero. Vuelvo
a quedar admirado con la habilidad de Enrique para desenvolverse por terrenos
complicados.
Como
ocurrió con la fuente anterior, la que ahora encontramos que es Fuente del
Hornillo, quedará solamente testimonial a nuestra izquierda cuando cogemos el
GR-10.1
Avanzamos
y paramos, avanzamos y paramos. No
queda más remedio. A
este rincón se le considera lugar natural y espectacular de la Sierra Norte de Madrid, ofreciendo unas
de las mejores vistas del Valle del Lozoya
y no pasan desapercibidas para nuestros ojos y para nuestras cámaras. Pero aún queda mucha ruta.
Puede
que algún día ascendamos hasta el Cerro del Cuclillo (1738) que queda a nuestra
izquierda, pero hoy tendremos bastante con afrontar los “bonitos repechones”
que nos aguardan pacientes y desafiantes.
Una
portera metálica nos indica que hemos llegado hasta el Collado del Hontanar (1731m). Viendo
el rampón que se presenta a nuestra derecha tal vez sea el momento de quitarse
alguna capa de ropa y tomar un poco de fruta.
Nos
estamos desviando hacia el PR-28. La
pista forestal se asemeja más a un cortafuego, que no ayuda mucho a rodar y
menos con el desnivel que va tomando. El
grupo se estira.
Con
el primer tramo alcanzamos Peñas
Viborizas (1788m) el punto más alto de nuestra ruta.
Como
en una montaña rusa del parque de atracciones los toboganes se suceden, pero
aquí no hay mecánica que empuje, solamente las piernas y la voluntad de cada
ciclista.
Es
un continuo sube y baja hasta el Cancho de los Altares (1771m), la Peña
Mingomolinera (1744m), El Espartal (1733m) y el Collado de las Fuentes (1633). Estamos en los Altos del Hontanar.
Cada
vez que alcanzamos un alto, ya podemos ver al frente el siguiente, pero no hay
desánimo, solamente palabras de admiración al mirar aquí o allá.
Se
realiza un duro esfuerzo pero se va salpicando con frecuentes paradas, porque
hoy hay que disfrutar de las maravillas que nos rodean en un día que se ha
presentado especialmente claro para no poner obstáculos a nuestra vista.
Por
la ladera del Cerro del Águila nos dejamos caer. Aún
podríamos seguir cresteando, pero nuestro desvío ha llegado cuando estamos
junto a cotera a la altura de El Portachuelo y la Fuente del Hontanar. El Arroyo del Hontanar prácticamente
nace bajo nuestros pies.
Por
debajo de la fuente buscamos el sendero complicado que nos pondrá ya en pista
más ancha. Largo,
con pendiente y curvas cerradas que te invitan a hacer un recto y salirte del
trazado.
Casi
6 kms de rápido y divertido descenso que no deja a nadie indiferente. En los altos fueron las maravillosas
vistas, ya nadie se acuerda de la dureza de los repechos, y ahora es la bajada
hacia el Embalse de la Pinilla la
que nos pone a todos en estado de éxtasis.
Las
frases de admiración y sorpresa han ido surgiendo de manera espontánea de cada
uno de los compañeros, pero no van a cesar. Los
ojos no se cierran por el sol, al contrario, se mantienen abiertos como platos
queriendo no perder detalle de lo que nos rodea.
En
anterior ocasión, se cruzó por puente el Río Lozoya en la cola del Embalse de
la Pinilla, hacia la localidad de
Pinilla del Valle, pero hoy optaremos por coger el margen derecho y seguir
sendero que a tramos será single y divertido, siempre con la vista del embalse
a nuestra izquierda.
A
lo largo de la mañana nos ha acompañado una suave brisa que mantenía la
temperatura en su punto más agradable y aquí, esa misma brisa, empuja las aguas
del embalse creando oleaje que muere en una orilla que quisiera ser ensenada. Una auténtica maravilla.
Al
otro lado del embalse la localidad de Lozoya
observa nuestras evoluciones erráticas y como avanzamos pocos metros y nos
detenemos de nuevo para hacer fotos y más fotos.
Alejándonos,
pronto llegaremos al Puente del Congosto,
sobre el Río Lozoya, cuyas obras de remodelación parecen haber terminado,
conservando el aire que te traslada a tiempos pasados… incluso las piedras
grandes e irregulares del paso, tal vez aptas para los caballos y mulos pero no
para los ciclistas.
Llegar
al Puente Canto, también rehabilitado no hace mucho, nos avisa de que estamos a
las puertas de Canencia, donde
algunos compañeros se han adelantado y se refrescan en la Fuente de la Barrera
buscando además algo de sombra a estas alturas de la mañana. Nos verá pasar de largo la Parroquia de
Santa María del Castillo, gótica.
Cuando
a todos nos apetece detener la marcha y tomar una cervecita fresca, hay que
seguir adelante. Aún
quedan kilómetros duros y no queremos demorar la llegada.
Un
tramo por carretera que tan poco nos gusta, pero apenas hay tráfico y enseguida
nos desviaremos a la izquierda junto al Puente de los Carboneros para coger
pista forestal (PR-28).
Nos
aguardan 6 kms de ascenso. La
temperatura ha subido y se nota a pesar de que marchamos bajo pinos. El duro desnivel continuo no ayuda a
refrescarse.
Unos
con prisa, otros que prefieren coger su propio ritmo… y atrás una avería de
Patrick que solventan pero que se demora bastante en el tiempo. Al llamar a Chicho me dice que ya
están en marcha, pero vuelvo atrás para acompañarles.
Recuerdo
que el año pasado hicimos esta misma ruta, que aún no tenía yo la e-bike y lo
mal que lo pasé en estos últimos kilómetros en los que Jesús y Rafa me dieron
escolta. Por
eso se de su dureza.
Los
tres que avanzamos juntos vemos más adelante a grupo que se ha detenido en
desvío y nos espera. Todo
conforme, todo bien, ¡vamos a por el último tramo! Pero, sobre una roca, olvidada, ha quedado
una mochila que Luis Ángel reconoce es de Alberto.
Puente del Congosto |
La
mochila echa de menos a su dueño pero él no a ella y rueda aliviado sin su
peso. No
es la primera vez que atrás queda una mochila sin dueño y no será la última. Suerte que siempre ha habido algún compañero
que ha recogido el objeto olvidado o que ha regresado horas más tarde y, con
éxito y fortuna, ha encontrado aquello que se extravió. ¿Verdad amigo Toño?
Puente Canto - Canencia |
El
aparcamiento del Puerto de Canencia está irreconocible cuando regresamos. Aquello es un hervidero de excursionistas
y de coches que esperan pacientes a que les dejemos sitio para aparcar… pero no
les quedará más remedio que darnos tiempo a que nos felicitemos y nos abracemos,
como no podía ser de otra forma.
Me sigue impresionando los valles de esta ruta. Qué maravilla de naruraleza¡¡¡¡
ResponderEliminarSupongo que disfrutais de todo, de vuestro deporte y qué mejor vivido en directo, estos preciosos paisajes.
Enhorabuena una vez más a todo el equipo.
Un saludo. Charo.
Gracias a ti amiga Charo en nombre de todos.
EliminarSiendo unas fotos todas estupendas, no reflejan la magnitud de la belleza de los paisajes de los que disfrutamos ayer.
ResponderEliminar¡Y eso que el fotógrafo es de los buenos!
Aunque las fuentes de la sierra ofrecen un agua estupenda, sería interesante tomar en consideración la propuesta de Alberto de pararse a tomar una caña en los bares de los pueblos...
Buena semana para todos.
Chicho
LA RUTA. Con mayúsculas.
ResponderEliminarImpresionantes vistas y paisajes. No hay palabras.
Le comentaba a Ángel Sierra durante el recorrido, que después de tantos (tantísimos) conciertos que he visto de Bruce Springsteen, cuando te preguntan cual ha sido el mejor la respuesta es siempre: *el siguiente *
Pues eso le pasa a las rutas de AlfonsoyAmigos Cual es la mejor ruta de todas? * la siguiente. *
Parece imposible tras tantas rutas, destinos, viajes y aventuras que las rutas se sigan superando fecha tras fecha
La de hoy es simplemente IMPERDIBLE.
Gracias a los que la habéis organizado y llevado el track.
Esa ultima subida a Canencia tiene mención aparte con ese desnivel constante del 11%.
Y si, si lo habéis leido desde el principio, lo habréis adivinado. Dos de mis grandes pasiones, Bruce Springsteen y AlfonsoyAmigos.
Buena semana a todos, y desde ya esperando la próxima ruta. En una semana, en un domingo que está.......cada vez mas cerca.
Si, es verdad, siendo la crónica en su narrativa, extraordinaria y las fotos(con el vídeo, gracias Toñín),para quedarse con la boca abierta, sé qué la siguiente, con todo,será mejor.
ResponderEliminarY, aún me siguen preguntando ¿No te cansas de madrugar, de dar pedales para arriba, de cargar con la bici....? Jeje
NO, porqué está de hoy va a ser mejor.
Y, yo no lo sabía, pero he visto valles inmensos tupidos de pinos, he visto el "mar" y he oido su oleaje, he subido montañas y he bajado a los valles con verde yerba y sombra de sus pinos...
Luis Ángel comento, lo que habéis leído más arriba y tenía razón, "la siguiente será mejor y cada vez está más cerca"
Gracias a los "nuevos" o recién incorporados , por enriquecer más el grupo.
Gracias a todos por estar ahí.
Sed Felices Un Abrazo.
Y luego dicen que Madrid no tiene mar...jajaja
EliminarAlfonso, muchas gracias por hacernos revivir los mejores momentos.
ResponderEliminarDon Quijote cabalgaba en su montura persiguiendo sueños. AyA cabalgan en la suya por las cumbres, a la búsqueda de las mejores vistas y los mejores momentos.
Ruta espectacular. Menudos paisajes.
Y en un derroche de energía nos dejamos para el final la subida a Canencia. Si es que los miembros de AyA están hechos de titanio. Alberto
Siempre tendré un cariño especial a esta ruta, recuerdo la subida que hicimos el año pasado Alfonso y yo, juntos y de la mano por esas rampas de Canencia. Cómo sufrimos ese dia. Alfonso me demostró como saber sufrir encima de la bicicleta. Lo recordare toda la vida!!!!
ResponderEliminarGracias Alfonso
Un abrazo a todos
Jesús
Vaya pasada de ruta.. y de las fotos que decir.... flipantessss
ResponderEliminarMira que habéis estado cerca de mi residencia y otra que me he perdido... joooo
Esa zona es flipannnte, como dice LA, ya no os la cuentann..
Bueno chavales, yo me encuentro ultimando Madrid - Segovia, se que muchos de vosotros no participaréis, pero bueno os llevaré dentro de mi maillot.. jejejejejeee
Muchos besos a tod@s
Bombi
Ruta preciosa por los paisajes y estupenda por la compañía.
ResponderEliminarSiempre es preferible acabar las rutas cuesta abajo, pero esta tiene el "premio" de una subida mantenida que te hace acabar justito sobre todo si no te la sabes y has gastado en exceso previamente.
Un disfrute, en breve la siguiente.
Un abrazo amigos.