El Montón de Trigo |
Perteneciente al término de San Rafael, al sur de la provincia de Segovia,
tiene una altitud de 2.161 metros.
Observando desde el sur la silueta del pico del Montón de Trigo, se entiende
perfectamente su nombre, ya que realmente parece un montón de trigo por su
forma cónica. Sus laderas, como en el
resto de la Garganta en la que nos encontramos, están cubiertas por un espeso
bosque de pino silvestre.
Si buceamos en internet, muchas son las leyendas que podemos encontrar sobre
el origen del nombre de esta montaña y todas muy similares, conservando el
fondo de la narración, pero yo me inclino por la que puedo leer en http://trotamontes.org/ y que aquí os transcribo:
Hace muchos siglos, uno de los campesinos
de la zona tuvo una excelente cosecha de trigo. Tras segar, todo lo iba
acumulando en sus almacenes.
Se le acercaron dos mendigos, para pedirle unos puñados
con los que hacerse un pan para ellos y sus hijos, pero el campesino dijo que
no tenía nada para darles, que aquello que veían no era trigo, sino montones de
piedrecitas.
Foto: Santi Calvo http://mtb-lapenota.blogspot.com.es/ |
Los mendigos insistieron, y el tacaño labrador los expulsó
con patadas e insultos, e incluso fue al alguacil para presentar una denuncia
para que los expulsaran de la comarca.
Al volver a su granja, vio con estupor que no quedaba nada de su trigo. Todo estaba vacío. Enseguida pensó que los mendigos lo habían robado, y organizó patrullas para perseguirlos y rescatar la cosecha. Todo inútil. Ni los encontraron a ellos ni al trigo. Tras varios días de búsqueda, cuando ya iban a desistir, un niño señaló a una montaña que hasta entonces no estaba allí: los granos de trigo, las piedrecitas que decía el labrador, se habían convertido en pedruscos que, amontonados, formaban un nuevo monte.
Desde entonces este monte se llama "Montón de Trigo" y su silueta lo parece especialmente cuando está nevado.
Al volver a su granja, vio con estupor que no quedaba nada de su trigo. Todo estaba vacío. Enseguida pensó que los mendigos lo habían robado, y organizó patrullas para perseguirlos y rescatar la cosecha. Todo inútil. Ni los encontraron a ellos ni al trigo. Tras varios días de búsqueda, cuando ya iban a desistir, un niño señaló a una montaña que hasta entonces no estaba allí: los granos de trigo, las piedrecitas que decía el labrador, se habían convertido en pedruscos que, amontonados, formaban un nuevo monte.
Desde entonces este monte se llama "Montón de Trigo" y su silueta lo parece especialmente cuando está nevado.
Que curiosa y bonita leyenda. Gracias por contarla.
ResponderEliminarUn abrazo
Miki
Preciosas las fotos y siempre interesantes las leyendas.
ResponderEliminarUn saludo. Raul (forofo).
Magníficas las fotos y muy curiosa la leyenda. Enhorabuena y ¡felicidades! a los atléticos. Je Je
ResponderEliminarJavivi