No dejes de perseguir tus sueños
Y mientras
unos compañeros emprendían regreso a sus hogares tras conquistar sus sueños,
otros, tal vez de peor dormir, nos reuníamos en la localidad de Moralzarzal,
con demora no prevista por haberse producido en las cercanías un grave
accidente de tráfico con víctimas mortales.
Siete amigos acudimos a la cita: Ángel, Fer, Juan, Pawel, Rafa y Alfonso… he dicho siete y es que, con gran alegría para todos, nos reencontramos con Nacho.
Ausencias
notables de compañeros que esta semana se lanzaron a la aventura de coronar el Col
d’Aubisque, puerto de montaña a 1709 m sobre el nivel del mar, en los
Pirineos Atlánticos, en la región francesa de Aquitania. Es este
un paso habitual del Tour de Francia desde 1910, catalogado como una
subida de categoría especial, ahora también alcanzado por AlfonsoyAmigos.
En
tierras nacionales, con mayor temperatura de la habitual, con el chubasquero en
la mochila y bajo unas nubes fanfarronas que amenazaron con lluvia toda la
ruta, arrancamos a pedalear a espaldas de Moralzarzal por el camino de
Alpedrete.
Sin
haber tenido tiempo de entrar en calor, iniciamos duro ascenso por pista y por el
valle, con tramos largos al 10% de desnivel, pero ánimo no falta. Puede
que alguno se haya acordado de lo a gusto que estaba esa mañana en la cama.
Un
respiro antes de proseguir por sendero más complicado pero que bien conocemos,
probablemente sobre antiguas canalizaciones de agua, hasta volver a tomar pista
junto al Pilón del Rincón.
Pasaremos de largo la fuente
del Vivero y la fuente del Retén a pesar de que se ofrecen
generosas, para continuar ascendiendo por pista en buen estado hasta desviarnos
por la derecha, hacia canchal que hace las veces de espléndido mirador y que no
perdemos ocasión de visitar.
Un kilómetro más y
alcanzamos el redondeado cerro de Cabeza Mediana (1331 m), donde se
asienta el histórico Telégrafo Óptico que fue conocido como Torre de Monte
Redondo, ya en el término de Collado Mediano.
Foto
de rigor para la biografía de AlfonsoyAmigos y emprendemos bajada, aunque ya se
aprecia cierta fatiga en algún compañero. Obligado
el paso por puerta metálica, que sustituye a la que durante muchos años atrás fue
un somier de cama atado con alambres y cuerdas y que ha dado nombre al
descenso: Camino del Somier.
Pista
ancha, acaso una cañada, que hace años quedó arreglada pero que, en la
actualidad, tal vez por la caída de aguas torrenciales, ha quedado muy rota y
obliga a descender con precaución.
Nos
acercamos al embalse de Navacerrada, con intención de rodear por los Horcajos
el Alto del Hilo que en alguna ocasión hemos alcanzado. Tramo
largo engañoso, pues encontramos sucesión de toboganes que van castigando en
las subidas y aparecen muy rotos en las bajadas.
Quienes
vamos delante esperamos para avisar de peligros y para reagrupar, pero Juan no
llega tras largo rato y no lleva walkie. Es a
través del móvil que logramos comunicar e indica que ha cogido senderillo intentando
atajar… Ya en
anterior ruta por esta zona, tomamos en
grupo esta opción de desvío y dijimos: “Mala idea”.
Los
toboganes se siguen sucediendo y se superan, aunque cada vez parecen más duros,
pero queremos llegar al Collado de las Cabezas y allí reunirnos… pero Juan
no aparece.
Avisé
de que el track sería modificado sobre la marcha, pero a veces casi sería mejor
quitar el juguete de la mano de algún niño. Conociendo
la zona, era el momento de coger variante desde el collado para descender hasta
el embalse de Navacerrada, atravesando puerta por la derecha y evitando así
un descenso trialero terrible que ya sufrimos en otra ocasión, muy peligroso y
que nos obligaría incluso a patear con problemas un buen tramo…
De
nuevo acudimos al teléfono móvil, pero Juan no ha esperado y ha decidido seguir
el track a raja tabla, avanzando ya trialera abajo. Nooooooo!!
No
hay más remedio que seguir sus pasos si no queremos acabar perdiéndole de vista
el resto de la ruta. Todos abajo.
La
hora se nos ha ido echando encima, no demasiado, pero si como para descartar el
tramo que nos hubiera acercado hasta Collado Mediano dando la vuelta al Cerro
del Castillo y el cansancio acumulado es más notable en alguno de los
compañeros, por lo que se propone recorte.
Atravesamos
la pantalla del Embalse, después zona urbana y por el camino de Becerril, al pie
de los pinares, regresamos a Moralzarzal.
Ruta
corta de kilometraje, con recortes, incidencias y extravíos, pero que nos ha
permitido dar algo de cuartelillo a quien se esfuerza por reincorporarse al
grupo. Ánimo.
¡Qué ganas de poder coincidir contigo en ruta Nacho!
ResponderEliminarMe alegro que hayáis disfrutado de la ruta... pero... el live track ayuda en esas circunstancias para ver por dónde va cada uno y poder "arrejuntarse".
Un abrazo y nos vemos el domingo.
Gran ruta la que disfrutamos, el recorrido, trazado, kilómetros, etc...fue lo de menos, lo más importante, la presencia y participación de Nacho después de un año, gran alegría de su incorporación y poder compartir con el metro a metro y minuto a minuto.
ResponderEliminarFer
Sin duda una gran alegría encontrar a Nacho entre las fotos y la crónica de este pasado Domingo. Deseando reencontrarnos en persona lo antes posible. Un abrazo.
ResponderEliminarWelcome Nacho!!
ResponderEliminarQue gran alegría saber de tu vuelta aunque en esta reaparición no hayamos podido coincidir.
Sin duda alguna la mejor noticia en ruta de AlfonsoyAmigos del año.
Espero que el domingo nos veamos en un gran rencuentro.
Un abrazo.
Alicientes para acudir a cualquier ruta de AlfonsoyAmigos, hay siempre de sobra. Hoy según llegaba al punto de encuentro, uno de los primeros compañeros que veo es Nacho, qué alegría.
ResponderEliminarY lo mejor de la ruta, el abrazo con él, después de tantos meses sin vernos.
Mención especial para Alfonso, gracias por el esfuerzo de programar la ruta y el reencuentro con Nacho, que a los que acudimos, encanto.
Sed Felices Un Abrazo