AlfonsoyAmigos en el Parque Natural de Alcalá de Henares

De todos es sabido que AlfonsoyAmigos es proclive a investigar nuevos destinos y si estos han sido ya explorados previamente, de ahí sale una ruta

Crónica: Luis Ángel   

Eso es lo que aconteció el domingo, nos dirigimos hacia Alcalá de Henares, un lugar que pocas veces se nos hubiera ocurrido a no ser por esa mentalidad exploradora de Patrick y Eva que ya llevan desarrollando un tiempo. Ellos mismos hicieron ya hace unas semanas la ruta que hoy nos proponían.

Fue ahí, en el Parque Natural de Alcalá de Henares donde nos citaríamos, Alfonso, Andrés, Ángel, Enrique, Eva, Fer, José María, Jesús, Juan, Santi, Patrick y Luis Ángel.

Hay que confesar que tanto el lugar, como la posible ruta despertaban cierto escepticismo, pero a decir verdad, las propuestas de Patrick y Eva siempre dejan un buenísimo recuerdo, con lo cual era cuestión de empezar a seguir el track que ellos ya habían firmado hacía pocas fechas.

El comienzo de la ruta es un tanto incierto. El track es un jeroglífico de cruce de caminos y de sendas, en un espacio grande pero al fin y al cabo acotado a lo que es el propio Parque Natural. Y tras unas primeras dudas decidiríamos que fuera Patrick el que marcara los caminos para ser fieles a su cuaderno de ruta.

Pronto descubriríamos que el día iba a tener momentos de mucha diversión en cuanto a toboganes y sendas rápidas, pero también unas subidas y pendientes difíciles de imaginar si no se ha recorrido ese parque. Y por ello, bajadas continuadas y subidas que marcaban porcentajes de desnivel del 13, 15 y 18% hacen que el grupo recorra la mañana en una perfecta hilera salvando cada uno de los cerros de estas inmediaciones.

Tras una durísima subida, llegaríamos a una de las partes más altas de estos cerros, el Alto del Burro, desde donde podemos divisar las cárcavas que se forman en las afueras de Alcalá de Henares. Desde aquí es hora de dirigirse a una de las diversiones más definitivas de la jornada, La Colada del Lagarto.

Una bajada larguísima, a gran velocidad, con peraltes, curvas cerradas y desniveles rápidos intermedios que permiten lanzar la bicicleta a toda velocidad haciendo que se disfrute absolutamente de una bajada en la que sin ser peligrosa no habría que desatender la precaución sobre todo por las velocidades que se llegan a coger en varios tramos.

La cara de mis compañeros lo dice todo, Fernando ha bajado en medio del grupo, y ha tenido que contener su lado salvaje de las bajadas. Patrick nos avisa y nos alienta diciéndonos que esa bajada la repetiríamos hoy tres veces, ¿Parque Natural o Parque de Atracciones? Sensacional esta bajada.

Pero después de esa bajada encontraríamos tres subidas que si bien no serían muy largas, obliga a meter todo el hierro posible, desniveles casi imposibles en senderos muy estrechos que hacen aún casi más difícil la subida. Sigo a Santi en una de esas subidas comprobando su magnífico estado de forma y su capacidad de sufrimiento.

Hemos llegado a una zona alta, en la que decidimos coger fuerzas desayunando en este momento. Alfonso comenta que pareciendo que ya hemos hecho gran parte de la ruta, solo llevamos 9 kilómetros de los 30 que hay que completar. Y cierto es que tampoco es demasiado tarde, pero es que este tipo de rutas con tantas subidas y bajadas continuadas el tiempo y la distancia parecen no transcurrir.

Pero todo llegará y tras volver a bajar esa montaña rusa comentada anteriormente, afrontamos ahora el "suplicio" de la mañana. Una subida de 2´5 kilómetros interminables con unas pendientes que viéndolas desde abajo se antojan del todo imposibles. Pero como a este grupo no hay quien lo pare, allá vamos todos. Volvemos a nuestro estado de fila india, aunque ahora el grupo se empieza a romper por culpa de la violencia de la pendiente.

Yo mismo tras completar la mitad de la misma y tras salvar un auténtico paredón, veo una auténtico muro imposible que debía tener  no menos del 30%. Ángel y Jesús me indican que es a la izquierda, ¡¡no por ese!! Ahí fruto de mi confusión hago una primera parada con las pulsaciones al máximo, dándome cuenta de que el trazado es por otro sendero durísimo igualmente pero salvable.

Santi de nuevo comprobando el camino correcto prosigue con la subida y decido seguirle. Con un magnífico y sabio ritmo es capaz de salvar dos curvas cerradas que quedan. Alfonso nos anima en todo momento ayudando a todos con su ritmo. Llevar siempre una voz amiga con un ritmo que permita “copiar” su estela es muy importante y muy de agradecer.

Por detrás diviso a Fernando, a Andrés, a Eva y Juan. Jesús y Ángel ya han culminado la subida. Ellos también pensaron que había que salvar aquel paredón mencionado y pronto descubrieron que el sendero "amigo" era el de la izquierda. Jalean y animan desde arriba, y allí llegamos Santi, yo mismo, Juan y la incombustible Eva que aunque conocía la subida de su anterior visita ha podido volver a dar cuenta de ella.

Impresionante todo el grupo, compruebo que van llegando uno a uno, Andrés, Enrique, José María, todos hemos completado desencajados por el esfuerzo, rotos por el dolor en las piernas, pero al fin y al cabo arriba en una nueva gesta que vuelve a poner de manifiesto la grandeza física, de pundonor y de moral de un grupo incombustible. Es AlfonsoyAmigos.

En esta subida llamada Ecce Homo llegué a ver pendientes del 23%, aunque ojo, la pendiente media parece ser del 17% según me comentaba Enrique. Ya desde allí arriba contemplaríamos todo Alcalá de Henares que aun siendo unas vista de la propia ciudad no dejó de impresionarnos a cada uno de nosotros. Las fotos aun siendo un buen ejemplo, nunca hacen justicia a lo que se divisa de forma natural.

Y vamos ya a finalizar la última parte de la jornada. Todavía quedarán algunas subidas importantes con las piernas ya muy muy castigadas, pero Eva y Patrick avisan que es último esfuerzo antes de la traca final. Volveríamos a pasar por el Alto del Burro y bajar algún sendero de media ladera no sin cierta peligrosidad por la caída de desnivel y tras afrontar un subida larga, nos volvemos a encontrar en lo más alto de la Colada del Lagarto.

Y ahora sí, es hora de dar rienda suelta a toda la adrenalina en una bajada trepidante, rápida, larga casi sin final, con Fernando por delante y bajando como si no hubiera mañana. Salvaríamos a media bajada una zona trialera escalonada de cierta importancia para poder continuar con nuestra bajada en dirección a nuestro punto de partida. Estamos finalizando la jornada.

Había sido una mañana diferente, en un entorno diferente y con un recorrido diferente, pero el grupo había sido el de siempre. Un grupo que supo mantener la disciplina en el esfuerzo en las subidas, la alegría en las bajadas y el compromiso en completar otra ruta en un entorno que nunca habíamos visitado.

Espectacular como siempre, la manera de llevar la ruta Patrick y Eva. No es fácil seguir y trazar un track como el de ayer con posibilidad de infinitos recorridos. Ellos lo hicieron y de qué manera. Es más, en esa ilusión que tienen por encontrar nuevas rutas, nos comentaron que tiene muchas por proponer. Sabéis que son bienvenidas y que AlfonsoyAmigos siempre está dispuesto a encontrar, recorrer y descubrir nuevo territorios.

Todos concluimos al finalizar que esta ruta había gustado mucho más de lo que en un principio creíamos prácticamente todos y la conclusión es que volveremos a visitar el Parque Natural en próximos ejercicios.

Gracias a todos. A mis compañeros de ayer, por ese esfuerzo continuado y esa ilusión que contagia siempre y a todos los que nos seguís en el blog.

Pronto sabremos destino de la semana que viene. Ese destino será para el próximo domingo... Un domingo que está cada vez más cerca.

Un abrazo para todos.

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