Si hablamos del Tour
tenemos que hablar del Tourmalet.
Junto al Arroyo Chuvieco |
La “montaña de mal retorno”, según la traducción a la lengua gascona,
es una montaña de culto para profesionales y aficionados al ciclismo, el deseo
de probar los límites humanos.
El Tourmalet forma parte
del Tour desde 1910 cuando mi tocayo, el periodista Alphonse Steines, fue a
investigar las condiciones del puerto y pasó un falso informe al director del
Tour, Henri Desgranges. "He cruzado el Tourmalet. La carretera es buena y
transitable". Mintió.
Luis Ángel JR. en el Mirador de Peña el Águila |
Si hablamos de bicicletas
en San Rafael, tendremos que hablar
de los ascensos hasta el Collado
Hornillo por la Cañada Leonesa, que
nos dan pie para iniciar mil y una rutas por la zona, con las variantes que la
imaginación llegue a permitirte.
Las temperaturas se
disparan, sobre todo en Madrid, pero sabemos que en San Rafael encontraremos entre 8 y 9 grados menos. Lógico
aprovechar cuanto nos resulte posible y deben saberlo los que los que hoy
acuden a la cita.
Mirador de Peña el Águila |
Andrés, Ángel, Antonio (se nos une en ruta larga por primera vez),
Chicho, Eusebio, Eva, Ferluy, Jorge, Juan, Luis Ángel, Luis Ángel JR., Nacho (definitivo: le ha entrado el virus AyA), Pawel, Toño y Alfonso.
Parece que las vacaciones
estivales empiezan a hacer estragos en nuestro grupo, pues echamos de menos
bastantes caras habituales, pero nos alegra hacer nuevos amigos.
Inicio de ruta en ascenso,
bordeando el parque de San Rafael
recién renombrado en homenaje al vecino ilustre D. Rafael Calvo Ortega.
Arrancaremos 14 desde el Paseo Rivera, pero en el mirador de Peña el Águila ya nos cogerá Eusebio.
Hemos recorrido la zona de piedras con algún resbalón y el mini repecho duro lo
hemos superado la mayoría. Oigo el oportuno grito de ánimo de Luis Ángel cuando
yo lo intento y logro, a pesar de que la bicicleta parece tener vida propia.
Buscando sombra en Collado Hornillo |
Ferluy ha partido de San Rafael con temor por su rodilla
izquierda, que le está dando problemas, y lo raro es que no tenga más dolores a
juzgar por los rutones que se marca solo o acompañado entre semana. Durante
todo el recorrido le veremos con cierta precaución y apenas alguna queja, pero nos
ha alegrado ver que aguantaba hasta el final.
Reposando a la sombra en Collado Hornillo |
No es habitual parar
demasiado tiempo en el Collado Hornillo,
ya que siempre corre un viento que te deja frío, pero hoy es diferente: No
corre nada de aire, la temperatura está alta como para aguantar al sol y todos
buscamos la sombra de un árbol mientras tomamos el primer avituallamiento.
¡Chicho arriba, que nos vamos!
Todos disfrutamos del
deseado descenso por los senderos rápidos y divertidos, avisando por walkie y
respetando cuando nos encontramos algún senderista. El walkie avisa de nuevo:
Avería.
La bicicleta de Eva ha
sufrido pinchazo y no faltan manos para ayudarla, al menos se han quedado
cuatro compañeros con ella. El resto esperamos un poco más adelante.
Se empieza a necesitar
agua, pero la Fuente del Hornillo no
da agua desde hace tiempo y la que hay junto al Camping de la Nava ya está seca.
Camping Valle Enmedio |
Esta vez no cruzamos la
puerta metálica hacia La Nava pues giramos a la izquierda al encuentro del Arroyo Chuvieco, que ya nos acompañará
gran parte de la ruta.
Ante la falta de fuentes,
algunos optan por coger agua en el arroyo, allá donde rompe el agua con fuerza en medio de un precioso paraje.
Arroyo Chuvieco |
Tenemos por delante una
auténtica pared. No, no es el Tourmalet, pero el desnivel y la abundante piedra
suelta impedirán que coronemos con orgullo y si con un penoso empujabike.
Bordeamos la zona de Mingo Rubio y la Urbanización las Damas, donde el sol quiere ser protagonista y la
alta temperatura se hace notar. Cada vez que decidimos reagrupar buscamos las
sombras como única opción.
Al cruzar zona de corrales
se nos muestran por delante dos alternativas de caminos, la de la izquierda
quedará para próxima ruta, pero hoy giramos a la derecha buscando las sendas
entre árboles.
Al fondo Cueva Valiente |
Primero en duro ascenso, después atravesando praderas increíbles
donde los senderos se han perdido por la alta hierba y más adelante disfrutando de
senderos sinuosos y divertidos entre pinos que nos llevan por encima del Embalse de Cañada Mojada.
Chicho, Pawel… no conocen
el embalse y se entretienen haciendo unas fotos. ¡Volveremos por aquí en otra
ocasión!, les digo, pero quieren su foto.
Puede que sea por el calor
o porque algunos compañeros no están habituados a este tipo de recorridos rompe
piernas, pero el grupo se estira como si fuera de goma mientras se rueda en
fila india.
Nos acercamos de nuevo al Arroyo Chuvieco, que será nuestro
compañero durante un buen tramo y nos obligará a cruzarlo hasta en dos
ocasiones más.
Senderos habilidosos y en
suave ascenso en los primeros tramos que hacen disfrutar a todos y después la
senda se irá complicando convirtiéndose en zona trialera donde conviene guardar
las distancias. El resbalón de uno puede detener la marcha de todos.
Los que conocemos la zona
vamos delante y se nota por cómo se trazan las zonas más complicadas y duras.
Al llegar al Collado Gargantilla, las felicitaciones
no faltan. El esfuerzo ha sido grande y la satisfacción se comparte por todos.
Fuente de Gargantilla o de Jesús Bellver |
El amagar con ascender
hacia Cueva Valiente ya se ha
convertido en otro clásico de AlfonsoyAmigos
y más cuando los relojes marcan las 12,30 horas, pero hoy se va a agradecer
volver pronto.
La Fuente de Jesús Bellver es generosa con su agua y además nos la
brinda bien fresquita, todo un lujo. Disfrutamos como críos, con bromas y
lanzamientos de agua. ¡Quien nos vea!
Y nos vamos cuesta
abajo, por sendas donde las últimas aguas han cambiado las trazadas y donde la
mano del hombre ha dejado también su huella salvaje sin aparente intento de
borrarla.
Los caminos están muy peligrosos por la cantidad de ramas sueltas
abandonadas y en varias ocasiones tendremos que poner pie en tierra para
apartarlas de nuestro paso.
Tal vez una de esas ramas
provoca pinchazo de Antonio, que se estrena también recibiendo la siempre
generosa ayuda de Juan.
Descensos complicados que
afrontamos con mucha precaución, pero Eva acabará clavando la rueda delantera
de su bicicleta y volará sin control. La bicicleta por encima, duro golpe y
rasguños… pero es fuerte como ella sola y acabará la ruta. Nos tranquiliza
cuando la preguntamos cómo se encuentra.
¿Que ha pasado con los senderos? |
Parte del Camino del Ingeniero por delante y en
giro complicado y descenso empinado junto al Arroyo Gargantilla me lo pienso, pero vuelvo a escuchar grito de
Luis Ángel con un ¡tú puedes! Y allá que voy haciendo cabriolas, pero resuelvo con alegría, seguro
que con la alegría de ambos.
Luis Ángel, no es el
primer día, seguro que no será el último. Tus gritos de ánimo llegan siempre,
justo en el momento en que se necesita un plus para alcanzar un logro, para
superar un obstáculo. Gracias amigo.
Descenso de Eva después de la caida |
Últimos cientos de metros que saben a poco y ya estamos en San Rafael,
contentos, felices, celebrando la ruta realizada y nos alegra más aún ver a Eva
sonriendo a pesar de su caída. ¡Cuídate amiga!
Esto no es el Tour, pero AlfonsoyAmigos ha vuelto hoy a rodar.
Frente a Las Farolas en San Rafael |
Las vacaciones me impidieron acompañar al grupo, pero ya llegará el momento de recuperar lo perdido.
ResponderEliminarSalvo el percance de la caída de Eva, veo que todo salió a pedir de boca.
Un abrazo.
Bueno, ya veo que la ruta fue divertida para los que les gusta el subir y bajar.
ResponderEliminarQué pena de monte¡¡¡¡. Deberían cuidarlo más.
Me alegro que el final terminase bien.
Menos mal que vuestra ruta dió fin en San Rafael, pues el Espinar fue cortado casi todo el pueblo para recibir una vuelta ciclista que terminaba allí.
Qué disfruten de sus vacaciones los que ya están en ellas, y a los demás, paciencia, que todo llega.
Un saludo. CHARO.
Ver la placa de Calvo Ortega a uno le invita a imaginar si alguna vez habrá otra similar con la inscripción de A&A, por vuestra contribución particular de dar a conocer y hacer valorar aun mas el entorno que nos rodea con su difusión a través de este estupendo blog. Sería un bonito y muy emotivo homenaje. Seguro que a más de uno le gustaría verlo. Ojalá!! Del sitio ya os encargáis vosotros.
ResponderEliminarSe ve que el calor no falla en estas rutas de verano además del otro calor, el humano, que siempre os acompaña independientemente del clima.
Un abrazo especial a la chica del grupo, Eva, que aguantó la caída, que algo debió de dolerle.
Abrazo y feliz semana
Como uno de los que me desplazo desde Madrid, os aseguro que es una gozada poder montar por la parte alta de San Rafael sin apenas notar los efectos de estos días de tanto calor.
ResponderEliminar¡Qué lujo! Y todavía más lujo, hacerlo en la compañía de AlfonsoyAmigos...--:)
Saludos a tod@s.
Chicho