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El Montón de Trigo - Leyenda

En nuestra última salida del domingo 6 de Mayo, recorrimos la Garganta del Río Moros y en una de las paradas que hicimos para fotografiarnos, pudimos contemplar una hermosa vista de una de las montañas más importantes y altas de la Sierra de Guadarrama, El Montón de Trigo,  que forma parte del ramal montañoso de La Mujer Muerta, localizado entre los valles del Río Moros y el del Río Eresma.

El Montón de Trigo

Perteneciente al término de San Rafael, al sur de la provincia de Segovia, tiene una altitud de 2.161 metros.

Observando desde el sur la silueta del pico del Montón de Trigo, se entiende perfectamente su nombre, ya que realmente parece un montón de trigo por su forma cónica.  Sus laderas, como en el resto de la Garganta en la que nos encontramos, están cubiertas por un espeso bosque de pino silvestre.

Si buceamos en internet, muchas son las leyendas que podemos encontrar sobre el origen del nombre de esta montaña y todas muy similares, conservando el fondo de la narración, pero yo me inclino por la que puedo leer en http://trotamontes.org/ y que aquí  os transcribo:

Hace muchos siglos, uno de los campesinos de la zona tuvo una excelente cosecha de trigo. Tras segar, todo lo iba acumulando en sus almacenes.

Se le acercaron dos mendigos, para pedirle unos puñados con los que hacerse un pan para ellos y sus hijos, pero el campesino dijo que no tenía nada para darles, que aquello que veían no era trigo, sino montones de piedrecitas.

Foto: Santi Calvo  http://mtb-lapenota.blogspot.com.es/

Los mendigos insistieron, y el tacaño labrador los expulsó con patadas e insultos, e incluso fue al alguacil para presentar una denuncia para que los expulsaran de la comarca.
Al volver a su granja, vio con estupor que no quedaba nada de su trigo. Todo estaba vacío. Enseguida pensó que los mendigos lo habían robado, y organizó patrullas para perseguirlos y rescatar la cosecha. Todo inútil. Ni los encontraron a ellos ni al trigo. Tras varios días de búsqueda, cuando ya iban a desistir, un niño señaló a una montaña que hasta entonces no estaba allí: los granos de trigo, las piedrecitas que decía el labrador, se habían convertido en pedruscos que, amontonados, formaban un nuevo monte.
Desde entonces este monte se llama "Montón de Trigo" y su silueta lo parece especialmente cuando está nevado.

Top Ten en la Garganta del Río Moros

Hoy nos fallan los “fondilleros”, pues el único que aparece a la hora prevista en el Paseo Rivera soy yo y con el cuerpo bastante revuelto.

Se diría que las fotos se repiten de otras salidas, pero los miembros del Grupo varían

Foto de Carlos

Decido rodar hacia La Estación y ponerme a prueba. Allí, calentando, encuentro a Paco y le propongo tomarnos un cafetito, para ver si me entono. A juzgar por como he marchado después, se diría que la decisión ha sido la acertada.

Al poco rato aparecen los "espinariegos", que vienen formando un nutrido grupo:  Carlos, Javier B, Javi “Galo”, Jesús, José, Santi Calleja, Samuel  y también puedo ver a Toño, que se ha animado a repetir.

Empezamos a rodar hacia la Garganta y Jesús nos comenta que tiene intención de realizar nuevamente camino hacia Santiago, a finales de Mayo.
En su página  http://www.bizing.es/ nos dará más detalles por si queremos compartir con él esta nueva aventura.

Por mi parte, transmito a todos el deseo de Ferluy de realizar ruta cruzando el Collado de Pasapán. Para la mayoría la mejor fecha es el domingo 20 de Mayo.

Aprovechamos para felicitar a Fernando “Ferluy” y a toda su familia por el merecido homenaje de hoy a su abuelo.

Pasaremos junto a Puente Negro y el Refugio de la Fuente del Guijo, por la zona que hemos identificado que han rodado algunas escenas de “Luna, el misterio de Calenda”.

La pista ha absorbido bien toda el agua caída en estos días y no está demasiado pesada. Rodamos bien, girando a la izquierda con intención de pedalear por la solana, hacia el Cerro del Retamarón.

Reagruparemos en varias ocasiones, pero la marcha es buena, a estupendo ritmo.

Al fondo Peña el Oso

Javier y Samuel participarán en un “San Fermín” improvisado, rodando rápido entre un rebaño de vacas y sus crías ya crecidas, que corren en estampida.

Magnífico ver los Embalses rebosando.

Al llegar a la fuente, junto al Embalse de El Espinar o Vado de las Cabras (1558 m), el grupo se separará.

Por andar con algo de prisa, Carlos, Javier, Jesús y Paco tomarán pista en descenso. El resto seguiremos rodeando La Garganta, respetando la pista principal.

Primero en Campanillas, después en Gudillos y finalmente en San Rafael sin problemas y disfrutando del descenso.

En la Puerta de Campanillas. José triste, le han dejado desparejado

A mí me han salido 40 kms justitos y hoy todo el mundo anda con prisas. No hay brindis con cerveza, pero si el recuerdo de una genial salida.

Y otra ruta a la saca.
                                                            Wikiloc - eltriton  IBP - 48

Ponerse en forma

No señor, no ha llovido en toda la mañana. La única web que ha acertado es AccuWeather. Tienen que venir “de fuera” a decirnos el tiempo que va a hacer “dentro”. Las webs nacionales no han acertado ¿será posible?.

Algún compañero ya había avisado de su deserción y temía acabar rodando solo, pero lo curioso es que a la hora prevista, en el Camino de los Pastores y a la altura de la fábrica de madera llegamos a encontrarnos nuevamente once bici-osos. Está claro que se produce una especie de rotación natural.

Creo que el único que ha repetido en nuestras últimas salidas, desde el 29 de Abril, he sido yo y, sinceramente, lo noto demasiado en las piernas, independientemente de que la ruta sea más o menos dura.

Hoy el grupo era variopinto, veteranos y nobeles, maduritos e imberbes (con diferencias de más de 35 años), muy en forma y con menos forma, altos y bajos, pero siempre con el ánimo de pasarlo bien.

Marcharemos por los márgenes del Río Gudillos, que ahora viene muy crecido. Nos mojaremos un poco los piés y se llenarán de barro los más intrépidos que se resisten a buscar los terrenos más fáciles.

Junto al Cristo del "Tío Cheli"

Tendremos que detenernos en la Fuente de los Aserradores para limpiar el barro de las máquinas.

Los más jóvenes y los más fuertes, acelerarán su marcha de vez en cuando, pero siempre después de preguntar dónde iba a estar la próxima desviación. ¡BIEN!.

Manuel, que se incorpora hoy por primera vez, tendrá problemas con su cadena durante todo el recorrido, a pesar de que en una parada se intenta darle solución.  Confiamos en que vuelva más veces.

Jaime, que ha reparado la avería de su bici está con ganas de darle fuerte y se ha traido otro amigo, Sergio, (perdona si te he cambiado el nombre, siempre me cuesta recordarlos en la primera salida), que vuelve a reducir la media de edad del grupo. Llevan poco tiempo montando, pero les sobra vitalidad. Me gustaría equivocarme al pensar que van a durar poco con nosotros.

Aprovecho para poner un anuncio:

Si estás empezando a montar, si crees que no estás en forma para salir en grupo...

Se ofrece:

RODAJE Y PUESTA EN FORMA

En ambiente distendido, visitando lugares llenos de interés, disfrutando de hermosos entornos y de la naturaleza, viviendo aventuras en grupo, compartiendo logros, alcanzando grandes metas, compartiendo amistad, compañerismo, buenos ratos, esfuerzos. Con la posibilidad de quedar inmortalizado en internet  y tener la oportunidad de invitar a los compañeros a unas cañas, siempre que lo desees.

Se requiere:

GANAS DE PASARLO BIEN.

Al fondo El Espinar

El Espinar - La Isabela - Buitrera

A pesar de la dura salida del día anterior, aprovechando que es fiesta para los madrileños y alguno más, Javier B nos propone salir por la tarde a “soltar piernas”, pero es este un concepto que no acabamos de tener del todo claro.

En la plaza del Ayuntamiento de El Espinar, nos saludaremos un grupito. Allí están Carlos y Juan que nos verán partir. Se une Santi Fernández, repite Daniel “Forlán” y se incorpora por primera vez Toño Montero, con el que inmediatamente haremos buenas migas.

Cuando pensábamos que rodaríamos sin afrontar desniveles importantes y sin forzar la marcha, nuestro Jefe de Ruta de esta tarde, Javier B, nos encamina por la Carretera de Ávila hacia el Campo de Golf y el antiguo vertedero.

Ya por la carretera la marcha será dura, pues el viento racheado nos sacude bandazos sin previo aviso, poniéndote en peligro de acabar en la cuneta.

Javier B toma la delantera, pero pronto notará que las fuerzas que le restan del día anterior van justitas. A pesar de ello es firme a su propuesta y juntos dejamos a la derecha el Campo de Golf, iniciando un primer ascenso llevadero, que se irá tornando en muy duro según tomamos altura y el viento nos ataca cruelmente libre de obstáculos que lo frenen.

Patéticos los últimos metros hasta la cancela, el jodido viento nos frena en seco como una pared.

Una rápida foto y a trepar por el tramo más duro, hace frío. Desnivel, piedras, el viento, pero allá que vamos intentando mantener el equilibrio.

Parto en cabeza y no se quien viene detrás de mí hasta que no encumbro. Me resultaba imposible girar la cabeza, pero oía el fuerte respirar de los que me seguían.

De las vistas ni os cuento, la mayoría las conocéis, pero no conseguimos disfrutarlas.

Sudor que se te queda frío si te detienes y que te invita a pegarte a la valla de piedra, único refugio posible en este instante.

Cuando por fin giramos a la izquierda para encaminarnos a la casilla de madera, observatorio de buitres, el viento se coloca a nuestras espaldas y nos hace remontar este trecho a toda velocidad, sin apenas dar pedales. Extraña sensación ver en ese punto el Parque infantil con columpios y balancines sin alegría de unos niños.

Fuera de lo habitual, la puerta del refugio se encuentra sin candado (están realizando alguna reparación) y no dudamos en introducirnos.

De repente, en el interior,  como si se hubiera activado un interruptor, el ruido y el propio viento desaparecen, dándonos una calma y descanso que se agradece.

Al salir, bromas y risas al fotografiarnos con los restos del festín de los buitres. Que si estábamos muertos de hambre, que si es un compañero que no ha aguantado la ruta...

Descenso rápido por pista muy pedregosa hasta coger el Camino de la Talanquera y regresar a El Espinar. El viento, siempre en contra salvo por el tramo mencionado, que no está dispuesto a ayudar ni para regresar a casa. Antonio cumplirá gustosamente con la regla "novato paga", al tomarnos unas cervezas.

Men in black de cara a El Espinar

Ruta y compañeros geniales, pero convocaré en breve a todos a una reunión, para explicar y dejar bien claro el concepto “soltar piernas”.