Debo reconocer que no soy nada
supersticioso y que prefiero pensar que si algunos números pueden tener influencia sobre nosotros es para
darnos buena suerte.
Buscar el lado bueno de cuanto te
rodea es la mejor forma de afrontar la vida. Eso creo.
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Peña El Águila |
Hemos quedado a las 8,00 en San Rafael y el
personal va llegando puntual.
Aquí espera Fernando, que duda si
ha hecho bien en salir. Aún no se ha recuperado de su gripe, pero aguantará bien la ruta..
Tendremos tiempo de hinchar una
rueda de mi bici y engrasar la cadena de la de Bombi. A su lado está Galo.
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Collado Hornillo |
Llega José Villena y detrás
Javi C, a pesar de que éste tuvo caída el último día.
Ángel por la izquierda, Jorge por
arriba, Andrés por el final del paseo; Juan, Javier B y Santi detrás.
Ya cuando estamos a punto de
partir aparece también Alberto.
Si habéis contado conmigo...
somos
13 biciosos, ansiosos de aventuras, los que emprendemos la marcha.
Javier tiene algunos problemas con
los cambios y se intenta darle solución. Seguirá adelante-
Rodamos en ascenso junto al campo
de fútbol y por encima de
Prado Acero hacia puerta metálica junto a la
Cerca de las
Monjas.
Aviso de avería, Javier ha roto
la cadena. Entrada en boxes y los
técnicos ponen manos a la obra.
Una vez más, ¿cuántas van?,
ascenso a
Peña el Águila y allí nos llevamos la alegría de encontrar a Quique.
¿O nos ha encontrado él? pues ha salido a buscarnos y en algún sendero nos ha
tomado la delantera.
Ya sobra ropa y más de uno se
despoja de la sobrante. Yo no tengo nada que pueda quitarme, otro día que me
toca sufrir por el calor.
Ascenso por la
Cañada Leonesa,
emparejado con José “Bombi”, con el que recuerdo que ya nos conocemos hace unos
ocho años.
Collado Hornillo, donde resulta extraño ver que hoy no hace viento.
Descenso por nuestro sendero
preferido, que siempre nos gusta a todos. Javier queda alucinado, la próxima
vez lo disfrutará más.
Bordeamos el camping por la
derecha y cogemos pista que en ocasiones se endurece, antes de coger sendero
trialero en ascenso que sigue el cauce del
Arroyo del Prado del Toril, que
acabaremos cruzando en un par de ocasiones antes de tomar un merecido descanso
en un estupendo prado.
Vemos a Juan trabajar moviendo
algunos troncos. Está preparando el paso para próxima ocasión. Es incansable.
Las caras de mis compañeros
reflejan que ha sido duro, pero que les ha gustado lo recorrido.
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Fuente de los Pastores |
Atravesamos el prado, ascenso y
hay que perder altura bajando por zona trialera que requiere atención.
Pilón del Chuvieco, pero apenas
da agua. Acudiremos a la Fuente de los Pastores a unos trescientos metros.
Por aquí se ve al grupo relajado
y se crea distancia entre cabeza y cola antes de reagrupar por encima del
Embalse de Cañada Mojada.
Tomamos senderillo cuyo inicio
puede pasar desapercibido. Ya hicimos algunos este recorrido, pero nos encanta
mostrarlo al resto de compañeros.
En suave ascenso seguimos
senderos que resultan muy agradables y que nos pondrán junto a finca ganadera
muy cerca de la
Urbanización Las Damas. Les ha gustado.
Dejamos a nuestra derecha el
Alto
de los Frontales y la zona de la
Fuente de la Reina, por donde el sol se hace
notar.
Quique avisa de que ha pinchado y
nos detenemos.
Algunos irán ganando terreno mientras que Juan tira de
entusiasmo y habilidad para ayudar y solventar el problema en tiempo de record.
Agrupados superamos dos repechos
duros y vamos en busca de cotera atravesando la zona de la Boca del Infierno.
Quique da unos primeros síntomas de fatiga.
Nos encantan los caminos
trialeros que cogemos a partir de ahora y que nos pondrán en cruce con el
Camino
del Ingeniero.
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En el Camino del Ingeniero |
Todos marchamos sentido
San
Rafael, es pronto y apetece la cervecita.
Disfrutamos del Ingeniero a
distintas velocidades, pero reagrupando de vez en cuando.
Tenemos varias zonas en las que
se requiere fuerza y habilidad, pero nada desconocido. Javi C afronta las zonas
complicadas sin problemas. Prueba superada.
Después de tomar un repecho
duro... el último, Quique avisa de que ha gastado ya toda la energía que le
quedaba y que prefiere descender hacia
El Espinar por el camino más corto.
Galo, Javier B, Alberto y Bombi le acompañarán. El resto proseguimos.
Nos recorremos el Camino del
Ingeniero casi al completo y disfrutamos. Se encuentra en muy buenas condiciones.
A punto de llegar a zona
urbanizada, José Villena tomará delantera pues va justo de hora. ¡Qué raro!
Los ocho restantes enfilamos
hacia nuestros amigos de Cafetería Jara, pero allí nos encontraremos de nuevo
con Bombi, que no quiere perderse la cerveza en grupo.
También se acercará Joss a saludarnos. Todavía tiene la su bicicleta sin arreglar.