Suena
el despertador, me asomo a la ventana y parte de mí me indica que vuelva a la
cama de inmediato, pero mi otro yo, mi otro 99,99% me lleva con rapidez a
pensar que voy a disfrutar otro domingo más con mis amigos de AlfonsoyAmigos.
Salgo
de casa y los 3 grados bajo cero y una sensación térmica terriblemente fría no
me borran la sonrisa de la cara, que por cierto, es gélida. A las
9:30, puntuales y abrigados hasta las cejas, aparecen: Andrés, Fer, Fernando y
Santi.
Crónica: Fernando Martín
Después
de unos saludos y unos choques de puño, que por cierto, nos saben a poco,
emprendemos marcha a nuestra querida garganta, la cual hoy nos brindará unos
paisajes verdes y blancos, como hacía ya algunos meses que no contemplábamos.
Empezamos
a coger altura pasado San Rafael cruzando puente que lleva pista hacia el Alto
del León, pero giramos a la izquierda cruzando arroyo y cogiendo sendero hacia
el depósito de agua pegado a la N-VI, las rampitas no bajan del 18% en un buen
tramo que se nos hace eterno, pero nos sirve para ir calentando motores, por
cierto, la nieve hace acto de presencia, haciéndonos derrapar rueda trasera en
más de una ocasión.
Superado
el primer esfuerzo con nota muy alta por mis compañeros, atravesamos nacional VI,
por un puente repleto de agua y en alguna zona por el temido hielo que a más de
uno, nos hace poner pie a tierra. Nuestro amigo Fer, ni corto ni perezoso, lo
atraviesa sin apenas problemas, cuanto tenemos que aprender.
Llegamos
a la alfonsina y giramos a la izquierda, me parece que cogeremos la senda de
nuestro querido Arcipreste, pero no, un giro a la derecha, inoportuno para mí,
nos hace coger senderito muy “chuli”, que nos lleva hasta el pilón y la
lagunilla antes de llegar a Campanillas, variante que tenía preparada Fer, y
que a todos nos ha encantado, la dejamos para recorrer de nuevo cuando todo el Grupo
pueda hacerlo.
Pasamos
Campanillas y el hielo que pisamos al cruzar la barrera al desmontar de
nuestras bikes, nos hace pensar que la subida va a estar complicada, por suerte
ninguna caída, solo algún resbalón sin consecuencias. Nuestras
botas no hay manera de engancharlas a los pedales, nos armamos con palos y
piedras como si tratase de neandertales y tenemos que golpear nuestras calas y
pedales para poder seguir recorrido, repetiríamos esto una docena de veces.
Empieza
el rock and roll, pista de subida totalmente blanca de nieve virgen, alguna
pisada de humanos, alguna bike y como no, nuestra querida fauna animal, que
ahora más que nunca dejan evidencia a su paso por nuestro bosque.
Poco
a poco, la capa de nieve empieza a crecer, al mismo tiempo que el frío, que ya
son cuatro bajo cero. Me dice Fer que si nos animamos con la subida, ya que la
fina capa de nieve, invita a ir más rápido, pero un pequeño grito de Santi
indica que algo no va bien en su cambio, efectivamente querido Santi, tiene las
roldanas rectangulares, el hielo parece pegarse a bike como pegamento súper-gel,
que recuerdos…
Una
vez subsanado el problema, continuamos ascenso y realizamos parada en desvió a
Marichiva, que luce un blanco satén que hace que se pare el tiempo por un
instante, lo hace un momento único, realizamos unas cuantas fotografías.
Acabamos
la subida, no sin antes comentaros, que durante muchos kilómetros de capa
espesa de nieve, lo más escuchado fueron los “Aysssss” de todos los integrantes
de ruta hoy, ¿por qué?, derrapes continuos, eses dibujadas en la nieve al igual
que ochos, ha sido divertido, pero ahora empieza el descenso, que puede ser
peligroso, pero siempre divertido. Lo
empezamos cautos y con mucha precaución, algunos siguen dibujando letras y
números en la nieve, no nos cansamos… de disfrutar
Llegamos
al Puente Negro y giramos a la izquierda para buscar campanillas y emprender descenso
a San Rafael, el frío se apodera de nosotros y tenemos que hacer parada para
buscar temperatura algo cálida en las manos, es horrible, pero sacamos calor,
no sé de donde todavía y seguimos pista hasta Campanillas a buen ritmo, lo
incrementamos, creo que ya estamos buscando otras temperaturas.
Nos
abren portera unos andarines, a los cuales les damos los buenos días y las
gracias, deseándoles buena ruta. Seguimos
por pista hasta San Rafael por Iberpistas, parece que nuestra ruta hoy ha
llegado a su fin, compartiremos unas cervezas e infusiones brindando por todos
y todas. Hemos acabado, sonrisas y satisfacción por la ruta realizada.
Siempre
acordándonos de todos los ausentes madrileños y segovianos, pero llevando el
espíritu de AlfonsoyAmigos por todas las pistas y senderos de la comarca con
orgullo. Un día
mas y un día menos, mucha salud y como dice Luis Ángel, el próximo Domingo cada
vez más cerca.
Se
despide de vosotros un servidor, ojalá que nos veamos muy pronto. Fernando