Permitidme un comentario sobre un tema ajeno a la bicicleta, pero que hoy estará en boca de todos.
Los que me conocen, saben perfectamente que soy del Atlético de Madrid desde que tengo uso de razón, pero lo cierto es que, en modo alguno, soy anti-madridista por definición de colchonero, o anti-culé. Disfruto con el triunfo de cualquier equipo español ante otro de fuera de nuestras fronteras, sin hacer distinción y, sobre todo, disfruto con el buen futbol que realice cualquier equipo. Insisto, me gusta el buen futbol, no el futbol en general. No estoy dispuesto a ver cualquier partido por el hecho de ser de “futbol”.
Desde hace un par de años siento predilección por el Barsa, por ser el equipo que me está haciendo disfrutar del espectáculo y sentir orgullo de haber practicado este formidable deporte. No disimulo que es mi segundo equipo, por adopción, ya que por nacimiento lo es el Atlético.
Ayer disfrute de lo lindo, fue un auténtico espectáculo, me mantuvo pendiente del partido desde el primer minuto hasta el pitido final y eso es lo que me gusta. Me alegré de que ganara el Barcelona, pero sin acritud hacia el Real Madrid, solamente porque hizo méritos para ello. Esperaba más del Madrid, como tantos otros, pero no le vimos como en los últimos partidos.
En resumen: ¡Felicidades al mejor!, y ayer el mejor fue el Barcelona.