Yo me encuentro revisando mi bicicleta, a la que no consigo
poner a punto. No hay nada peor para ponerte de los nervios.
Ayer salimos algunos para recorrer unos kms sin demasiada
intensidad, se pensaba en el domingo, pero volví especialmente dolorido sin
saber por qué.
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| Coincidiendo con otros amigos - Foto de Andrés |
Limpiando la máquina noté que el amortiguador trasero estaba
distendido, como si hubiera perdido presión. Esto provocaba un “cambio de
geometría” y me había obligado a usar fibras diferentes. ¡Qué finos nos hemos
vuelto! Tiro de bomba y la dejo la bici lista para la mañana siguiente.
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| El otro grupo y Fernando chupando cámara |
Pero me equivoco. Después de realizar toda la rutina
matutina cojo la bici y en cuanto me subo en ella el amortiguador se viene
abajo. (Suelto un taco gordo).
Intentos fallidos de recuperar la presión adecuada y aunque
inicio la marcha con mis compañeros, a los pocos metros tengo que desistir y
verles marchar. Aún haré un último intento de conseguir presión, por si puedo
alcanzarles, pero es inútil.
Será ya al regreso cuando me llamen para compartir unas
cervezas y brindar por el nuevo año.
(Pincha para ver nuestro vídeo felicitación)
