El fracaso no me sobrevendrá si mi determinación para alcanzar el éxito es lo suficiente poderosa (Og mandino)
Crónica: Luis Ángel
Decididos desde hacía varios meses en poder
culminar uno de nuestros objetivos en bici, 6 amigos de AlfonsoyAmigos nos embarcamos en esta aventura que nos llevaría a
los Alpes en Francia. En definitiva completar dos de los puertos más míticos de
la ronda francesa, como son el Alp
D'Huez y La Croix de Fer.
Para ello, Andrés, Enrique, Ernesto, Jesús, Santi y Luis Ángel comenzarían ese viaje el pasado sábado para poder apuntar en su curriculum esas dos cimas y que recordaremos ya siempre como objetivos cumplidos.
El viaje que nos llevaría a Los Alpes no comenzaría de forma fácil, ya que un despiste a la hora de repostar combustible, nos haría retrasarnos para llegar a nuestro destino final que era nuestro hotel en la estación de los 2 Alpes. No obstante tuvimos la suerte de poder subsanar ese despiste y en 100 minutos estaría resuelto, y podríamos emprender de nuevo el camino.
Para ello, Andrés, Enrique, Ernesto, Jesús, Santi y Luis Ángel comenzarían ese viaje el pasado sábado para poder apuntar en su curriculum esas dos cimas y que recordaremos ya siempre como objetivos cumplidos.
El viaje que nos llevaría a Los Alpes no comenzaría de forma fácil, ya que un despiste a la hora de repostar combustible, nos haría retrasarnos para llegar a nuestro destino final que era nuestro hotel en la estación de los 2 Alpes. No obstante tuvimos la suerte de poder subsanar ese despiste y en 100 minutos estaría resuelto, y podríamos emprender de nuevo el camino.
Habiendo llegado a Los Alpes no pudimos contemplar la magnificencia de estas montañas, ya que la noche se nos acabó echando encima. Pero tras una cena bien merecida tras tan largo viaje, ya estábamos dispuestos para la primera de las dos jornadas de bici que nos esperaban el domingo y el lunes.
El domingo, madrugando bastante, ya pudimos contemplar lo impresionante que son los Alpes, según nos dirigíamos en coche al punto de partida de nuestra primera ruta. El objetivo principal era culminar la ascensión al Alp D´Huez con sus 21 míticas curvas.
El día es espléndido, con bastante calor pero soportable ya que la altura de estas montañas hace que la temperatura aunque alta, sea soportable.
El Alp Dúez tiene ese sabor tan impresionante que es el del Tour de Francia, donde las primeras rampas son las más duras. Pero entre nosotros la ilusión es tan grande que esos primeros 3-4 km discurren casi sin darnos cuenta. Ernesto decide no parar ni una sola vez. Su reto es subirlo sin parar. A los demás les parece imposible no parar a hacer una serie de fotos imprescindible en el cuaderno de ruta de cualquier ciclista que haga esta subida. Yo fui incapaz de escapar a esa tentación de poder tener esos recuerdos para el resto de mi vida. Soy consciente que los demás, también.
Además , si ya de por si el puerto tiene ese tremendo aspecto a ronda gala, coincidía con la prueba de La Marmote Granfondo Alpes, que suben 4 puertos del Tour, y que congrega a muchísimos corredores y público a lo largo de toda la ascensión. Bicis, público, coches de apoyo policía y 6 de AlfonsoyAmigos. El escenario no podía ser más épico. La meta de esa prueba es además en el propio Alp D´Huez
Alp D´Huez es un puerto duro, pero particularmente creo que menos que lo que inicialmente pensábamos. Sus curvas planas, hacen que las pendientes no sean violentas y puedan ser acometidas de manera ágil. De alguna manera me atreverá a calificarlo como un puerto duro pero amable a la hora de subirlo.
Fuimos llegando a la "meta" del Alp D´Huez y tras las fotos obligadas de rigor en lo más alto del puerto, continuaríamos nuestra ruta hacia otro pico más alto La Sarenne. Si el Alp está a 1803 metros La Sarenne suponen 2 kilómetros adicionales para alcanzar los 2.000 metros.
Toda la subida nos pareció sensacional por todo lo que pudimos ver en esas montañas, el espectáculo desde el mirador de la Sarenne es absolutamente indescriptible. Posiblemente el escenario más bello de las dos jornadas era el que estábamos contemplando en esos momentos. Tras una muy larga bajada llegaríamos a nuestro punto de inicio con el orgullo a niveles máximos por haber completado un día histórico para nosotros.
El lunes se presenta de igual modo, con la ilusión máxima puesta en la jornada que vamos a empezar. Se trata de escalar al Col de la Croix de Fer, desde la localidad de Burg d'Osains. Contemplamos que aun siendo lunes laborable el tránsito de ciclistas por todas las localidades es muy intenso. La cultura de ciclismo de carretera en Los Alpes es enorme y la gente emplea muchísimo tiempo y recursos en todo lo que es el mundo de la bicicleta de carretera.
Los primeros kilómetros son de alguna manera llanos, pero pronto divisamos la placa que nos dice que para coronar La Croix deberemos ascender 31 kilómetros con 1.350 kilómetros de desnivel. A la postre creerme si os digo que sería terrible.
Este puerto es larguísimo, los kilómetros
parecen no transcurrir y en algún momento aunque las rampas sostenidas son del
8-9% (solo...), hay tramos que llegan a tener el 14-16%. Pero sobre todo lo
larguísimo que es parece que en algún momento parece tragarte ya que el avanzar
se hace muy difícil. En esta ocasión yo decidí subirlo de un tirón, pero serían
los 40 kilómetros desde que habíamos partido, una empresa nada fácil por las
propias características antes comentadas. Los paisajes siguen siendo preciosos
y las montañas que rodean todo el puerto son realmente impactantes.
La llegada al Col du Glandon a 2000 metros es durísima y extenuante. Yo cuando llegue creía que era imposible haber coronado. 29 kilómetros de subida donde aquello no parecía acabar. Vi llegar a Enrique, Ernesto y después a Jesús, Santi y Andrés que habían decidido hacer una subida más tranquila haciendo algunas paradas para comer y beber en alguna fuente y arrollo del camino. Increíble que tras el esfuerzo estos tres últimos llegaban con una sonrisa, provocada sin duda por la satisfacción de haber cumplido. ¡¡Y de qué manera!!
Tras una brevísima parada en el Gladon, tendríamos que recorrer en ascenso también 2 kilómetros para culminar nuestro objetivo del día y del fin de semana. Era La Crox de Fer también a 2.0000 metros, ya que tras una pequeña bajada está a la misma altura que el pico anterior.
Según estaba subiendo todo el puerto, el sufrimiento era extremo. Con dolor en todo el cuerpo, pero con la mente diciendo que cada vez quedaba menos. Pensé en esos momento que para terminar, para llegar, la única manera de hacerlo era haciendo del sufrimiento tu mejor aliado.
Habíamos culminado, habíamos cumplido y la emoción se desborda, sabiendo que esta subida será inolvidable, por su dureza, por su longitud, por su historia... y por saber que prácticamente quedaban 40 kilómetros de bajada, ya que la ruta no era circular. En este capítulo de bajada, Jesús y Enrique decidieron explotar esa faceta a ritmos infernales
Un fin de semana increíble donde pudimos pasar grandes momentos juntos, saboreando lo que son estos puertos del Tour y comprometiéndonos a acometer nuevas cimas dentro de no mucho tiempo.
La parte más negativa fue la avería en la vuelta del coche de Santi que nos obligó a dejar el coche en tierras francesas y volver ellos en un coche de sustitución por parte del seguro. No obstante esa avería, estoy seguro que no hará mermar en nada la ilusión, el orgullo y la satisfacción de haber podido estar en dos de los puertos más importantes del Tour. No había habido fracaso, porque nuestra determinación para lograr el éxito había sido lo suficientemente poderosa.
Resumen de las dos rutas es haber recorrido 130 kilómetros y 4.600 metros de desnivel positivo acumulado entre las dos. Y aunque el esfuerzo fue máximo seguro que repetiremos experiencias en otros puertos
Tan es así que ya hemos pensado en cual será nuestro próximo objetivo. Seguramente el año que viene por estas fechas, si no antes.
Solo deciros que nos acordamos muchísimo de todo el grupo de AlfonsoyAmigos, conscientes de vuestros ánimos durante los dos días. De alguna manera este éxito es de todos nosotros, vosotros.