No destruyas tus sueños, destruye tus
límites
Crónica: Patrick
Hoy, por fin un
domingo de sol después de unas últimas semanas de lluvias y temporal, hemos
vuelto por la zona de Madrid de la Sierra de Guadarrama donde la primavera ha
llegado de lleno y el campo esta tan verde como los prados del Norte.
Ayer ya “repasé” la
ruta con el compañero Luis Ángel que, por compromiso, no podía acudir hoy y doy
fe que disfrutamos de la “pre-ruta”, así que es con tranquilidad que acudo al
punto de encuentro donde se congregan 14 amig@s listos para disfrutar de la
montaña…
Alfonso, Andrés, Ángel,
Enrique, Ernesto, Fernando, Jesús, Juan Patricio, Lorena, Nacho, Nico, Pawel, Rafa
y Patrick.
La primera parte de
la ruta nos llevará por la ladera de la sierra justo por debajo de la zona de
los Lomitos por donde tantas veces hemos pasado.
Empezamos por
seguir a buen ritmo vías pecuarias que pasan por Alpedrete y Guadarrama que nos
llevan a la zona de Los Molinos.
El calor
rápidamente se hace sentir y realizamos una parada de “destape” donde todos nos
quitamos ropa sobrante.
Antes de abandonar
las zonas “habitadas”, nos hacemos una foto de grupo en un Bunker recién
desenterrado. Es interesante ver que estos vestigios de
la historia de España empiezan a intentar conservarse.
Nos adentramos
ahora en zonas de campos y monte bajo donde los piornos en flor nos rodean...
Seguimos subiendo
poco a poco y llegamos muy pronto a la presa
de los Irrios también conocida como presa del “Bocao” por el característico boquete en su muro que se hizo a modo
de aliviadero al comprobar que no iba a aguantar retener tanta agua.
Después de un
descanso a orilla del embalse retomamos la marcha para bajar y volver a subir
siguiendo siempre por debajo de la vía del tren.
Ahora nos toca
cruzar la carretera N-VI y bajar hasta el túnel que nos permite cruzar por
debajo de la A6 y empezar la segunda parte de la ruta: la Jarosa.
Como aperitivo un
buen rampón de cemento justo después de pasar el túnel y nos espera ahora una
larga y dura subida con tramos medios de 16%. Menos mal que
estamos a la sombra de los pinos ya que el calor empieza a apretar.
Cada uno a su
ritmo, seguimos pedaleando cuesta arriba hasta llegar al punto más alto de la
ruta donde se impone un descanso.
Estamos justo en el
“Cerro del Cebo de los Lobos” y como
recompensa toca bajar por una trialera muy divertida donde Enrique lee
perfectamente las trazadas y se la baja a una velocidad de vértigo.
Seguimos bajando
por pista y senderos por los pinares de la Jarosa. Reagrupamiento y
toca una nueva subida, la última del día, pero las fuerzas mermadas y muchos
metros de desnivel acumulados en las piernas hacen que el pelotón se estire.
Un tirón en la
pierna me obliga a parar y estirar y Alfonso con su eléctrica me empuja unos
metros para ayudar a recuperarme.
Llegamos a la tapia
del Valle de los Caídos y la
seguimos ahora en una bajada vertiginosa, la del camino de Cerro Santo donde
Alfonso logró ver ¡¡60km/h en su display y 57,47km/h en su gps!!
Último
reagrupamiento para cruzar la carretera y volver a Guadarrama por ella. Hay mucho tráfico y
la jornada de votación hace que haya mucho más tráfico y gente. Cruzamos el pueblo
y cogemos de vuelta la colada de los Labajos que nos devuelve con un ritmo
endiablado a nuestro punto de partida.
¡Abrazos, sonrisas y
refrigerios bien merecidos después de unos 46km y unos 940 metros de desnivel
positivo acumulado!
Ya estamos haciendo
planes para el puente de Mayo así que… ¡estate atento al Blog!