domingo, 4 de diciembre de 2011

Garganta Río Moros - Senderos

Vienen desde El Espinar y desde La Estación para concentrarnos junto a mi casa (¡qué suerte tengo!). Samuel ha llegado pronto y pertrechado como para aguantar la “tormenta perfecta”.

Echamos de menos a Fernando, que tenía ganas de salir pero no se ha atrevido por su dedo.
Sabiendo que, por culpa de la nieve caída, no podríamos subir a gran altura, pretendo llevarles por senderos y recorridos fuera de lo habitual, que nos permita rodar y realizar un continuo esfuerzo. Mejor no contar cuales son mis intenciones.

Caída de Carlos



Ya desde San Rafael, repecho duro, para tomar altura y acabar pasando por encima de la Fuente de la Botella y por debajo de la Fuente de las Nieves. Las raíces que cruzan los caminos están húmedas y peligrosas.






Paso de cancela para coger dirección Peña El Águila, que abandonamos por la izquierda para pasar por el Prado Juan Llanos y acabar cruzando Arroyo Mayor.
Al llegar a Prado Acero, Carlos nos deja para regresar a casa. Antes, ha tenido una pequeña caída sin importancia.

Ferluy, Javier, Paco, Samuel y yo seguiremos recorrido hacia Gudillos.
Abandonando el recorrido habitual hacia el pilón, subiremos esta vez por la pista y antes de alcanzar la Casa del Baldío, tomaremos pista de tendido eléctrico a la izquierda para llegar muy cerca de Las Mesas. Este ascenso es durillo.


Senderos para llegar al cruce de caminos en Campanillas, giro  la derecha y nueva subida dura.

A partir de aquí ya no os contaré por donde hemos subido o bajado, ya que ha sido constante y difícil de definir, pero sí deciros que hemos superado cuantos repechos se me han ocurrido y conocía.







La nieve nos ha acompañado durante todo el recorrido, ocultando algunos de los senderos y dificultando la orientación, pero se ha rodado bien y con precaución. Varias caídas sin consecuencia, por culpa de algún resbalón.





El paisaje estaba precioso, miraras donde miraras. 
El rodar era muy agradable y nadie se ha quejado de los desniveles acumulados, ni siquiera Javier.


Unos 35 kms pero muy aprovechados. Creo que el global del recorrido ha sido durillo, pero Ferluy ya estaba pensando en salir nuevamente por la tarde. Y dice no estar en forma...


sábado, 3 de diciembre de 2011

Arroyo Mayor en San Rafael

Paseo por los Pinares de San Rafael, partiendo de cancela junto a la Cerca de las Monjas, en donde nos saluda como siempre un hermoso mastín.
Rodando en dirección a Peña el Águila veremos grupo de excursionistas. Aquí, explica el guía, hace unos años estuvo instalado el decorado del Laberinto del Fauno. Pincha este enlace si no viste el reportaje
Seguiremos avanzando junto al margen del Arroyo Mayor, donde es fácil encontrar setas cuando la climatología es la propicia.
La niebla y la humedad te rodean, pero te resistes a tomar el camino de regreso. Te fundes con la naturaleza.

                                         Pincha en este enlace para ver el reportaje completo

Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos


Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos



Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos


Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos

Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos

Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos

Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos


Arroyo Mayor - San Rafael - Alfonsoyamigos

lunes, 28 de noviembre de 2011

Se nos pierde el niño


Si el sábado hizo bueno, el domingo ha sido genial.
A la convocatoria acuden muchos valientes, que lo son porque el reto es duro.
A las 10 de la mañana nos juntamos Sanrafaeleños y Espinariegos, junto a la piscina de El Espinar. Creo que no hay una foto de grupo con todos, pero en la suma de todas no se escapa nadie.
Santi Calleja nos enseña orgulloso su nueva “burra”. Después será protagonista.


Pretendemos rodar en ascenso junto al antiguo vertedero y el campo de golf de El Espinar, realizar toda la cresta y regresar por el Collado de Gargantilla.

Algunas de las etapas serán La Isabela, La Cepeda, Cruce de las Tres Provincias, Lagunillas y Gargantilla. Vamos, que practicamente no dejaremos de subir y subir.

Los primeros kilometros los recorreremos por la Carretera de Ávila y con precaución, aunque a esas horas hay poco tráfico. Ya desde el principio, los más fuertes harán gala de su poderío.
Los repechos muy duros los vamos afrontando con respeto, salvo Juan que sigue tirando de plato grande (en algún momento le veré con plato mediano, seguramente para dar un respiro a la bicicleta).

La dureza de los tramos provoca que se formen dos grupos diferenciados, aunque se realizará agrupamiento en puntos clave.
Cerca de las Tres Provincias, la distancia entre los grupos es superior a lo recomendable.
Cuando el segundo grupo llegamos al cruce de caminos, no alcanzamos a ver al grupo de cabeza, pero optamos por realizar la ruta habitual, confiando en encontrarnos más adelante, ya que es imposible alcanzarles y los móviles nos cantan su falta de disponibilidad en esa zona.

En un momento en que se recupera la cobertura, nos avisa Ferluy de que Santi Calleja ha desandado camino en nuestra busca y no ha regresado.

Las comunicaciones resultan imposibles, aunque lo intentamos en varios puntos. El teléfono de Santi tampoco da señales de vida.

Aceleramos marcha por llegar a Las Lagunillas, donde Javier, Carlos y Santi F. emprenden regreso para intentar localizar a nuestro extraviado. Paco y yo seguiremos marcha para regresar a San Rafael.


La preocupación será grande, hasta conocer a través de Jesús y Carlos que han dado con Santi y han regresado a El Espinar volviendo por El Boquerón ¡Vaya susto!.

Creo que la ruta ha sido buena, no exenta de dureza, pero que el último incidente la ha enturbiado.
Todo ha acabado bien, pero debemos aprender que es siempre mejor para todos rodar agrupados o, por lo menos, mantenernos siempre al alcance de la vista.
Un fuerte abrazo para todos.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Revenga - Acebos

Teníamos auténtico mono y se nota porque a las 9,10 de la mañana y con unos 2 grados, ya me encontraba en Revenga, junto a Javier, Jorge y Samuel, los cuatro esforzados que haríamos esta ruta.


Después de acabar de montar las “burras” nos ponemos a rodar sin más demora.
Ya conocemos que el inicio es duro, que tenemos varios repechos fuertes al principio y que te coge muy en frío. Por eso, intentamos ir muy suaves para empezar a coger grados.
La primera cancela se encuentra abierta y cuando llegamos a la segunda, empezamos a notar el calor del esfuerzo. Además, como apunta Jorge, hay inversión térmica.

Desde aquí divisamos claramente el Pantano de Puente Alta y alguna nube o niebla baja.
Se suaviza el desnivel y disfrutamos del precioso entorno, pero nos durará poco. En pocos minutos nos vemos nuevamente afrontando otra subida dura y pedregosa hasta La Cruz de la Gallega, donde siempre podemos ver troncos apilados.

Ahora si que tenemos que desprendernos del exceso de abrigo y lo haremos antes de rodar por el Camino de Santiago.
El terreno toma más desnivel y se complicará en ocasiones por volverse pedregoso, tanto que nos obliga a tener no solo fuerza en las piernas, sino auténtica habilidad para seguir sin poner pié en tierra.
Esperábamos ver buitres como en la última ocasión, pero hoy no quieren saber nada de nosotros; no se deja ver ni uno solo.


Todo el recorrido vamos bastante agrupados. El descanso obligado de la semana pasada no nos ha hecho perder mucha forma, o la hemos perdido todos en la misma proporción, ya que creo que no se nos nota.
Todavía seguiremos subiendo, teniendo muy pocos respiros, pero se lleva bien.
Descanso para tomar una barrita y a seguir subiendo.
Llegaremos a estar muy cerca de la Fuente de la Reina, pero no es nuestro objetivo y el dúo J/J (Javier y Jorge) tienen que volver pronto a casa.
Emprenderemos descenso por camino forestal muy agradable, que nos obligará a cruzar el Río Peces (¿eh Javier?).
Al vadear el río, nos libramos por los pelos de mojarnos, cada uno poniendo a prueba su habilidad y dominio del equilibrio, ya que el caudal ha crecido bastante y además es fácil resbalar. Nos felicitamos en el otro margen.
Pero la alegría dura poco. Frente a nosotros, podemos ver parte del tramo más duro de la ruta. Una cuesta descomunal, que siempre es más dura y larga de lo que aparenta, pero que afrontamos con voluntad y decisión.
Por mi parte, que voy delante (solo porque he salido antes), me veo obligado a meter el último piñón cuando quedan unos 25 metros para llegar a la zona cómoda y de respiro. Jorge llega conmigo y de Javier y Samuel no se como les ha ido, hubiera resultado imposible volver la cabeza en pleno esfuerzo.

A partir de ahora, disfrutaremos de un continuo sube y baja, pasando por la zona hermosa de plantaciones de acebos, de gran tamaño, pero que aún están empezando a dar su conocido fruto rojo. En pocas fechas se pondrán realmente bonitos.
Más adelante, descenso trialero de mucho desnivel, en el que ponemos todos a prueba los frenos. Abajo, al cruce con pista forestal, los discos están al rojo vivo y los de Jorge alabeados, aunque recuperan su forma al enfriarse.

Regreso nuevamente a la Cruz de la Gallega y desde ahí hasta los coches, aunque el cuerpo te pide todavía algo más de guerra.
Jorge parte rápido de vuelta a casa, pero el resto aprovecharemos el paso por Otero para tomar unas rondas a la salud de Javier, (que esta semana ha cumplido años), en el Restaurante Jesús, de donde siempre salimos contentos.
Estupenda ruta, bien disfrutada.
Javier, ¡que cumplas muchos más!.
                                                        Pincha este enlace para ver el video