Nieve en Mayo en San Rafael y El Espinar

Ha llegado un punto en el que ya no nos fiamos de las previsiones meteorológicas

Crónica y Fotos: Alfonso

Y puede que hagamos mal, porque nos empeñamos en despreciar olímpicamente los avisos que recibimos… “se han equivocado tantas veces”.

Fuente de los Aserradores

¿Cómo te puedes creer que regrese el frío invierno cuando acabas de sacar casi la ropa de verano? “Se habrán equivocado otra vez, ya verás que al final no es para tanto”

¿Qué no es para tanto?

Quedada en El Espinar para el domingo y a las 7 de la mañana, cuando abro uno de los ojos, está cayendo una nevada abundante que ya está cuajando en las calles.

Sin perder las esperanzas salto de la cama, hago mis abluciones, desayuno como si la vida me fuera en ello y me visto de “romano”.

Patrick, el magnífico, nos cuenta que ya ha cogido el coche para salir de casa y viene en camino… pero rápidamente es contestado: ¡¡ESTÁ NEVANDO!!

Si el valor contagia valor, la prudencia disfraza semillas de miedo y contagia temor. Alfonso

Los avisos de baja caen como fichas de dominó y habrá quien sienta alivio al saber que no será el único en volverse a la cama en día tan desapacible.

Patrick, no se resigna y lanza bengala para ver si algún otro náufrago de ruta se le une. Ya nos contará él.

A media mañana, será mi mujer la que me anime a dar unas pedaladas aprovechando que los cielos parecen haberse despejado. “Que si no sales luego no hay quien te aguante” – me dice. ¡Cómo me conoce!

Me vuelvo a vestir de romano con más celeridad que esta misma mañana y pronto estoy presto para salir. –Adiós, en un par de horas estoy de vuelta.

El robledal ya lo visité ayer en compañía de nuestro amigo Fernando y su ya inseparable e-bike, tras un encuentro casual pero emotivo. La verdad es que no se encuentra en sus mejores momentos… el robledal, Fernando tampoco. Ambos necesitan pasar por un espá. (desde el cariño)

Hoy mis ruedas giran hacia Gudillos y decido pasar junto a Iberpistas y subir por la “alfonsina”. Echo de menos al san bernardo y al labrador que tiempo atrás te ladraban al pasar por esta zona y cruzo la puerta metálica que todos conocemos.

En medio del camino, apenas echado a un lado, un pino yace caído acaso por la fuerza del viento o el peso de la nieve.

Recorrer este sendero sin prisas es un deleite para los sentidos y hoy más para la vista. Nieve, agua, vegetación alta y piedras que te obligan a avanzar con fuerza y habilidad.

Ahora no llueve, pero de los pinos cae la nieve cuyo peso no puede soportar. Se diría que el bombardeo de nieve es constante y hasta peligroso, pero recuerda a niños tirando globos con agua desde el balcón.

El agua, las ramas y la nieve crujen bajo las ruedas y aquí y allá caen esas bombas que voy logrando esquivar hasta que una me cae de pleno en la cabeza… El casco me salva del golpe, pero la fría nieve se cuela por los agujeros.

Un par de horas me llevará mi atrevimiento sin alejarme demasiado de casa, pero tendré tiempo de pasar frío y de calarme hasta los huesos.

Soporto una fuerte granizada durante los rápidos kilómetros de regreso y viéndome como llego a casa, todo mojado y embarrado, tal vez mi mujer se arrepienta de haberme animado a salir.

HASTA EL CUARENTA DE MAYO; ¡NO TE QUITES…  EL CULOTTE LARGO! 

Crónica: Patrick

Hoy estaba programada una ruta por El Espinar y después de tanto tiempo sin pisar tierras segovianas… teníamos todos muchas ganas de volver a descubrir senderos tantas veces recorridos en anteriores rutas… ¡algunos más que otros! (todo hay que decirlo)

A pesar de las condiciones meteorológicas que barruntaban agua y nieve, me levantaba temprano y dejaba colgado el Culote corto y maillot de verano que había estrenado el día anterior durante la Madrid-El Espinar, ruta que formaba parte del entreno para la Madrid-Segovia y que realizaron 7 valientes compañer@s: Andrés, Ángel, Eva, Forlán, Juan Patricio, Juan Platón y yo mismo que me descolgaba en Cercedilla para atender asuntos familiares. Prueba de entreno superada ¡Enhorabuena a tod@s!

Hoy toca de nuevo vestirse de largo y recuperar la ropa que ya casi estaba guardada en el armario. Así que vestido de capas de ropa calentita y botas impermeable me subo al coche cuando recibo escucho en Radio-AyA que avisa de tormentas de nieve y se suspende la ruta por razones cautelares.

¡Mi gozo en un pozo! Nada de eso, un Bretón no se deja amedrentar por unas cuantas gotas de aguanieve así que lanzo una propuesta para trialerar por la Sierra de Hoyos detrás de mi casa y poder quitarnos el gusanillo. Además, si la cosa se pone fea, estaremos siempre cerca de la salida y podremos volver a los coches enseguida.

Responden a la llamada Chicho y Toño, el “Diablo Verde”, que tiene muchas ganas de exprimir su nueva EVIL en las trialeras técnicas de Hoyo. Una hora más tarde estamos los tres subiendo el camino del avestruz que debe de haber pasado al estado de filetes porque no aparece desde hace mucho tiempo.

Primer tramo de pista, pero aviso que empezaremos pronto a subir y con tramos largos de empuja-bike. Es necesario sufrir un poco para poder disfrutar después…

Nuestro primer objetivo es la trialera del “Hilo Blanco” que ya hicimos con el grupo este invierno. A partir de los 1200 metros de altitud el paisaje esta ya totalmente nevado y es en un mar de setos de Jaras y Romeros blancos que empezamos a bajar por la primera trialera del día. Muy rota en algún tramo, pero con un terreno que, bajo la lluvia, agarra de maravilla. Enlazamos casi sin parar con la trialera del Escalón Rojo detrás del Cerro Lechuza y con Toño a rueda la devoramos en un santiamén con una sonrisa en la cara. Ya se nos han quitado todos los males… Estamos felices y además ¡ha dejado de llover!

Volvemos a la pista principal para coger la disfrutona single-trail de la Casa del Huerto. Me lanzo envalentonado a tumba abierta y en una de las primeras curvas derrapo y me voy al suelo, pero sin consecuencias. Seguimos y llegamos al arroyo de Peregrinos que con tanta técnica logró cruzar Eva sin mojarse los pies la última vez en una imagen que paso a la posteridad.

Todavía nos quedan ganas y sale el sol para recompensar nuestros esfuerzos. Subiremos la trialera de “Investigación” (nombre no oficial acuñado por Patrick & Chicho, S.L.) que se hace muy bien en este sentido para enseguida enlazar y bajar por la Trialera de la “Línea de Alta Tensión” que tiene sus pasos técnicos pero asequibles.

Volviendo de nuevo a la pista, nos comenta Chicho que le gustaría ver la Cascada del Covacho y por los senderos de Hoyos allá que vamos…  La cascada esta preciosa y con tanta agua cayendo se parece “algo” a las cataratas del Niagara.

Volveremos por la lancha de piedra, tantas veces bajadas por AlfonsoyAmigos con más o menos suerte y algún que otro resbalón, y de nuevo a la pista para volver a los coches, lavar las bicis y tomar unas cervezas y aperitivos en “Casa Patrick” donde... ¡Siempre hay una sonrisa para atenderles y… proponer rutas alternativas! 

ooOoo

Propuesta para este Martes 1 de Mayo 
Quedaremos a las 9,30 en el Paseo Rivera de San Rafael

Rodaremos disfrutando del entorno y regresaremos a buena hora.

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